
La consejera de Educación, Esther Niubó, durante una comparecencia en el Parlament
Cataluña
La consejera de Educación ‘pasa’ del Comité de Peticiones del Parlamento Europeo y no comparecerá este miércoles
Tenía que dar explicaciones sobre por qué no se están aplicando las recomendaciones de los eurodiputados para que no se excluya al español en las escuelas de Cataluña
La consejera de Educación, Esther Niubó, tenía que comparecer este miércoles ante el Comité de Peticiones (PETI) del Parlamento Europeo, que la había citado para que diera explicaciones de por qué no está aplicando las recomendaciones de la misión de eurodiputados del 2023 para que no se excluyera al español de las aulas.
Todo ello, por la denuncia de las asociaciones que defienden el bilingüismo, que pidieron «ayuda» a Europa, porque «no puede tolerar que el gobierno de España y de Cataluña incumpla las recomendaciones de un informe tan duro», en palabras de la presidenta de la Asamblea por una Escuela Bilingüe, Ana Losada.
En este informe se exigía poner fin a la discriminación del español en la educación; a la Generalitat se le pedía que cumpliera las sentencias sobre el 25 % de español; o que las comunicaciones con las familias y las páginas web de los colegios y la Generalitat estuvieran en ambas lenguas, sin necesidad de que las familias lo soliciten individualmente.
Pues bien, la consejera Esther Niubó no va a comparecer ante el PETI alegando motivos de agenda. Ni ella, ni nadie de su Departamento. Ni siquiera lo van a hacer por streaming, que era una de las opciones que le habían ofrecido. La responsable de Educación no está obligada a asistir, pero las entidades y también los partidos que habían pedido su comparecencia lo consideran una «falta de respeto».
En cualquier caso, tampoco ha sorprendido la decisión de Niubó, porque en el pleno de la semana pasada, a preguntas del diputado de Vox, Manuel Acosta, ya dejó entrever que no iba a comparecer, porque la Comisión de Peticiones, aseguró, «no tiene ningún tipo de potestad para legislar sobre el sistema educativo de un Estado». En esa intervención también dejó claro que el Govern «cumplirá, desplegará y desarrollará» la ley aprobada por el Parlament sobre el catalán en la escuela en 2023 y no fomentará «la judicialización, la crispación ni el odio».
La carta de Niubó a PETI
A principios de año, la consejera envió una carta al presidente de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, Bogdan Rzoca, que quería saber cómo estaba aplicando la Generalitat las recomendaciones de la misión europea que analizó el sistema educativo catalán, la inmersión lingüística. En ella, Niubó aseguraba que «El Departamento de Educación y Formación Profesional de la Generalitat de Cataluña respeta y ejecuta las sentencias judiciales respecto al uso de las lenguas oficiales».
También defendía que en Cataluña «no se violan los derechos del alumnado ni de las familias, ni se discrimina por ningún motivo, incluyendo el de ser castellanohablante». Y apuntaba que, en caso de un «supuesto conflicto» entre familias y escuelas, es la Inspección de Educación la que,«informa, acompaña y dirime cada caso en particular, aplicando la normativa en vigor».
Esther Niubó aseguraba en la carta que los resultados que obtienen los alumnos catalanes son similares «y elevados» tanto en castellano como en catalán, lo que confirme que el modelo lingüístico, según ella, «es uno de los que obtiene mejores resultados de Europa a la hora de proporcionar competencias plurilingües al conjunto de su alumnado».
También la responsable de Educación insistía en el argumentario de que la escuela catalana «ha asumido la función de cohesionar e integrar la sociedad catalana, compensar sus posibles desigualdades socioeconómicas y culturales, y asegurar el pleno dominio de las lenguas oficiales», y todo ello, asegura, cumpliendo la normativa vigente, la Constitución y la jurisprudencia del Tribunal Constitucional.