Los arquitectos que convertirán el ‘templo romano’ del centro de Barcelona en un «oasis» para los vecinos

El Ayuntamiento de Barcelona encargará el anteproyecto de adecuación y rehabilitación del Taller Masriera a los estudios de arquitectura Länk y DATAAE. Visto desde la calle, este edificio situado entre los números 70 y 72 de la calle Bailén –en el barrio del Eixample derecho– destaca por su aspecto de templo neoclásico, y fue construido en 1882 por José Vilaseca como atelier para los hermanos Masriera, pintores y orfebres.

El proyecto de los ganadores del concurso municipal se estructura en torno a la idea de recuperar el edificio y el jardín –se buscará «acentuar la percepción del verde como parte esencial del proyecto», según un comunicado enviado por el Ayuntamiento–, manteniendo el pórtico y la columnata, pero aligerando el interior, que acogerá una biblioteca municipal, un teatro-sala de actos y un espacio comunitario y vecinal.

Para ello se prevé convertir la entrada ajardinada al edificio, según el citado comunicado municipal, en «un pequeño oasis en medio de la ciudad consolidada». El jardín se «estirará» en el interior del nuevo equipamiento municipal, en un vestíbulo que se convertirá en un ágora y recuperará su altura original y la iluminación cenital, a través de una linterna: «El espacio adquiere un carácter noble y agradable, cargado de historia», señalan desde el consistorio.

En suma, se trata de un diseño que respeta el patrimonio arquitectónico y, a través de una «estrategia de vaciados interiores» consigue espacios altos y muy luminosos, con luz natural. Con estos vaciados, además, se recuperarán elementos originales de valor y espacios nobles del conjunto que habían quedado desfigurados con las sucesivas intervenciones a lo largo de las décadas desde que se erigió el edificio hace más de 140 años.

El teatro, o studium, contará con una platea plana con un sistema de tarimas elevables para mejorar la visibilidad y permitir nuevas configuraciones. También se actualizará el escenario. La sala tendrá capacidad para acoger a 278 espectadores. Para el regidor del distrito, Jordi Valls, el proyecto «recupera un edificio patrimonial y lo encara hacia el futuro».

El anteproyecto tendrá un coste de 83.000 euros, y la previsión es contar con él este mes de noviembre. Desde el Ayuntamiento señalan que la rehabilitación como tal del edificio se prevé para el próximo mandato; esto es, a partir de 2027.