El alcalde de Vic, Albert Castells, en una imagen de archivo

El alcalde de Vic, Albert Castells, en una imagen de archivoEuropa Press

Polémica en Vic

El primer alcalde catalán condenado por «discriminación» lingüística no acepta la sentencia: «Recurriremos»

«Iremos hasta donde haga falta», asegura el alcalde de Vic, Albert Castells

El alcalde de Vic, Albert Castells, se ha convertido en el primer gobernante municipal de Cataluña condenado por exigir un nivel desproporcionado de catalán –el B2– para acceder a un puesto de operario municipal en el cementerio de la localidad barcelonesa. El Juzgado de lo Contencioso número 15 de Barcelona ha condenado al ayuntamiento a rebajar el nivel al «básico» A2.

Según consta en la sentencia, el juez declara «nulas» las bases del concurso y obliga al ayuntamiento a pagar 1.000 euros. El magistrado considera que el requisito del B2 no está «conectado» con las funciones del puesto y que «genera una barrera de acceso con efecto excluyente», por lo que constituye “una discriminación directa por razón de lengua».

La sentencia ha sacudido las filas nacionalistas, provocando que incluso el presidente de Junts, Carles Puigdemont, entrase al trapo: «A golpe de sentencias se va retornando al régimen monolingüe que impuso Franco», ha dicho en X. La vehemencia del líder independentista ha encontrado eco en el propio Castells, que también pertenece a Junts, y que en una entrevista para RAC1 ha adelantado que el consistorio recurrirá la sentencia.

«Hasta donde haga falta»

«Iremos hasta donde haga falta, hasta la última instancia», ha dicho Castells, señalando que la lengua «es el pilar fundamental de la convivencia y la cohesión, y hemos de garantizar su pervivencia». Castells, que es socio de Òmnium Cultural y la ANC, ha insistido: «¿Cómo velaremos por los derechos fundamentales si el personal de la administración no tiene unos mínimos de catalán?».

El alcalde de Vic ha señalado que «no entiende» la sentencia, y que forma parte de una «persecución clarísima a la lengua catalana». También ha invitado al juez a visitar Vic y dar una vuelta por el pueblo, pero no ha rebajado el tono desafiante: «El Ayuntamiento de Vic garantiza que el próximo operario de cementerios se dirigirá en catalán a sus vecinos».

Cabe recordar que Vic es una de las principales ciudades que aún gobierna Junts, pero también es una de las plazas en las que se espera que Aliança Catalana gane mucha presencia, tal vez incluso llegando a disputar el gobierno municipal. Según el Instituto de Estadística de Cataluña, en 2024 el porcentaje de extranjeros de Vic era del 29,84% de la población; esto es, casi uno de cada tres.

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