La Guardia Civil

Un agente de la Guardia Civil

Una discusión de niños por una colleja deriva en un tiroteo entre sus padres en Valencia

El autor de los disparos esperó a la víctima, que pudo salvar la vida, con una escopeta en su coche un día después de que ambas familias tuvieran una acalorada pelea por el corte de pelo de uno de los chicos

Una discusión entre dos niños ha estado muy cerca de derivar el pasado martes en una tragedia en la localidad valenciana de Domeño cuando el padre de uno de los jóvenes realizó cuatro disparos con una escopeta al progenitor del otro. Por suerte, este último pudo salvar la vida milagrosamente al refugiarse en su domicilio. Lo llamativo es que el tiroteado fue detenido un día antes por amenazar con una navaja al autor de los disparos.
Según los datos que maneja la Guardia Civil, encargada de la investigación del suceso, y tal como avanza el periódico autonómico Levante-EMV, el origen de este episodio podría estar en una colleja que uno de los chicos le dio al otro por haberse cortado el pelo, una broma muy común entre jóvenes y adolescentes. Ello habría provocado una pelea entre ambos a las puertas del colegio donde estudian y, posteriormente, una importante discusión entre sus madres.
Lejos de calmarse los ánimos, un día antes del tiroteo, el lunes, las dos familias coincidieron cerca de un supermercado del municipio de Líria (Valencia). Allí, los padres se cruzaron insultos y amenazas hasta que, después de comenzar a darse golpes, uno de ellos sacó una navaja.

Esperándole en el coche

Fue entonces cuando hasta el lugar se desplazaron agentes de la Policía Local y procedieron a detener al hombre que había amenazado con el arma blanca. El otro padre tan solo fue identificado y se le citó en el Juzgado como investigado para comparecer por un supuesto delito de lesiones mutuas, aunque no llegó a acudir.
Una vez el retenido fue puesto en libertad, ya el martes, se dirigió a su casa en Domeño. Cuando iba a entrar en el domicilio advirtió que cerca había un vehículo sospechoso que no tardó en reconocer. Se trataba del padre del compañero de su hijo. Este bajó inmediatamente del coche portando una escopeta y disparó cuatro tiros.
Al haberse percatado a tiempo pudo entrar en la vivienda y, de ese modo, sobrevivir a este presunto intento de asesinato. En cuanto al autor del tiroteo, huyó al instante en el mismo vehículo en el que estaba esperando a quien quería acabar con su vida.
Tras el suceso, la Benemérita acudió a la casa de la víctima y se entrevistó con él. Hasta la fecha, no se han producido detenciones al respecto.
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