Alicante  Drogados con gas de la risa y con la tapa de la alcantarilla atada: así asesinaron al camionero Gheorghe

Gheorghe Tibil era un camionero rumano de 50 años afincado en la población alicantina de Almoradí desde hace años. Trabajaba en la empresa Castillo Trans, situada en la localidad vecina de Benejúzar y que opera a nivel internacional. Hace unos días emprendió un viaje en su camión junto a su pareja, Maria Godja, con quien mantenía una relación sentimental desde hace cinco años y tenían planeado casarse en su municipio de residencia el próximo 31 de agosto.

Hace unos días Gheorghe y Maria partieron de Alicante rumbo a París para llevar a cabo una entrega de mercancía. Cuando atravesaban la autovía E42 de la ciudad belga de Lieja, el hombre se encontraba hablando por teléfono con un amigo tras haber relevado a su mujer al mando del vehículo alrededor de la una de la madrugada.

En un momento dado, el amigo escuchó un fuerte ruido de cristales rotos y dejó de oír a su amigo, solo escuchaba los gritos de Maria, que durante la llamada estaba durmiendo.

Minutos después, esta le devolvió la llamada y le relató la pesadilla que acababa de vivir: mientras circulaban por la autovía, al pasar un puente, un objeto atravesó violentamente el cristal del parabrisas del camión e impactó directamente contra el cráneo de Gheorghe, que murió en el acto. Ante esta dramática escena, la mujer se vio obligada a tomar el volante del tráiler para poder orillarlo y evitar así más víctimas.

Una vez había parado, comprobó que el objeto que había acabado con la vida de su prometido era la tapa de una alcantarilla de 20 kg de peso atada a una cuerda de un metro de longitud.

Rápidamente, las fuerzas de seguridad belgas iniciaron una investigación y a las pocas horas se entregó uno de los implicados, delatando a los otros cuatro integrantes del grupo, dos de ellos menores de edad, que fueron acusados de homicidio. Según los informes preliminares, los presuntos asesinos, actuaron bajo los efectos de las drogas, según confesaron ellos mismos. En concreto habrían consumido óxido nitroso, también conocido como gas de la risa, antes de cometer el crimen.

«La droga de moda en Europa»

«El óxido nitroso es un gas con propiedades anestésicas, analgésicas y disociativas, incoloro, casi inodoro y con un ligero sabor dulce. Es una sustancia de alta disponibilidad y bajo precio. Existe una percepción social de seguridad en su consumo. Se ha convertido en una droga de moda en Europa, barata y popular entre los jóvenes; pero su consumo puede conllevar graves secuelas», advierte el Ministerio de Sanidad español en un informe elaborado el pasado año.

La empresa para la que trabajaba la víctima, Castillo Trans S.A., ha mostrado su consternación ante la trágica noticia. En un comunicado, la compañía ha anunciado su «determinación de buscar justicia y responsabilidades por la muerte de su empleado», además de coordinar la repatriación del cuerpo a Rumanía, el país natal de Gheorghe.

Por su parte, el gremio de camioneros también ha alzado su voz, exigiendo «más seguridad en las carreteras y justicia para Gheorghe y su familia». Antonio Gabaldón, secretario general de la Federación Provincial de Asociaciones de Empresarios de Transporte de Mercancías de Alicante (Fetrama), ha reclamado «medidas más estrictas» para proteger a los trabajadores del sector y evitar tragedias como esta.

El hermano de la víctima, Vasile Tibil, se ha pronunciado a través de la red social Facebook, donde ha lamentado el asesinato de su hermano mostrando su incredulidad ante esta tragedia.