El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, baja del Falcon presidencial
Sánchez ha hecho 17 viajes internacionales frente a los dos a la zona arrasada por la dana en Valencia
El presidente del Gobierno se ha desplazado el doble de veces a Bruselas para tratar el tema de la guerra en Ucrania que a Paiporta, Chiva o Utiel, además de otros trayectos como China, Brasil, Vietnam o Irak
No se puede decir, en honor a la verdad, que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, vaya escaso en lo que a reproches se refiere, tanto a su gestión puramente política como a otros aspectos que de ésta se derivan. A lo largo de sus casi siete años en el Palacio de La Moncloa ha acumulado diferentes críticas. Algunas de ellas le han acompañado desde, incluso, antes de que triunfase la moción de censura que le aupó al poder y, además, otras han derivado en motes.
Una de las que más se popularizó en su momento y que sigue vigente es el apodo de 'Falconetti' en relación al uso, para algunos abuso, que el jefe del Ejecutivo hace del Falcon, es decir, del avión presidencial. Por acotar el tiempo, cabe destacar que tras el estallido de la dana del pasado 29 de octubre, el líder socialista tan solo ha viajado a Valencia en clave institucional en tres ocasiones.
La primera fue el 31 del mismo mes, solo dos días después de la tragedia, y en ese viaje se vio con el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y acudió a la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi). No tardó mucho en volver, ya que el 3 de noviembre acudió junto a los Reyes y al mandatario autonómico a Paiporta, una de las llamadas zonas cero de la tragedia.
El resultado de esa visita es de sobra conocido: los vecinos y voluntarios cargaron contra las instituciones de manera verbal y física. Los monarcas y Mazón terminaron el recorrido previsto, pero Sánchez huyó del lugar argumentando que había sido atacado, dejando sola al resto de la comitiva. Poco después, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, atribuyó la escena a grupos de ultraderecha y después fue el propio presidente el que compareció para tranquilizar a la población nacional asegurando que él estaba «bien».
Apretada agenda internacional
La tercera y última visita en representación del Gobierno a la Comunidad por algo referente a la dana ocurrió el pasado 23 de enero. Eso sí, lejos del fango, de las calles todavía anegadas y de miles de coches apilados junto a comercios que jamás volverán a abrir. En esta ocasión, se desplazó hasta la Delegación del Gobierno, en pleno centro de la capital levantina y bajo unas más que notables medidas de seguridad. Allí, su anfitriona, Pilar Bernabé y algunos alcaldes de localidades afectadas se citaron. Y no ha vuelto, más que para una acto de partido, para entronizar a Diana Morant como secretaria general del PSPV-PSOE.
Pedro Sánchez y Pilar Bernabé, en Valencia tras una reunión por la dana
Sea por falta de tiempo, por desinterés, por mero cálculo político o cualquier otra razón, esta desaparición de Sánchez a la hora de estar junto a los vecinos que lo perdieron todo contrasta sobremanera con la apretada agenda internacional que ha mantenido en los últimos seis meses. Más allá de recibimientos en Moncloa a líderes extranjeros o reuniones telemáticas, el citado Falcon ha recorrido algunos kilómetros.
En total, tal como ha comprobado El Debate con información oficial de la agenda presidencial, han sido 17 viajes fuera de nuestras fronteras los que desde la dana ha realizado el jefe del Ejecutivo mientras no se ha pasado de nuevo por Chiva, Utiel, Aldaya, Picaña, Torrente o cualquier otro municipio devastado de las decenas que lo fueron. La primera salida tuvo como destino Azerbaiyán el 11 de noviembre con motivo de la COP 29 en Bakú, donde se trató el tema del cambio climático. A esta le siguió Brasil seis días después para asistir a la reunión del G20.
Como es natural, Bruselas es una ciudad habitual para Sánchez. Desde el 29 de octubre ha ido un total de cuatro veces (18 de diciembre, 3 de febrero, 6 de marzo y 20 de ese mismo mes). Una materia que también ha provocado diversos desplazamientos del socialista es la guerra de Ucrania. Para abordar la evolución y posible solución del conflicto viajó el 17 de febrero a París, el 24 a Kiev, el 2 de marzo a Londres y el 27 otra vez fue a la capital francesa. Por ende, cuatro viajes para Ucrania y solo dos a la zona cero de la dana, la mitad.
Además, otros trayectos presidenciales han sido el foro de Davos, en Suiza, Finlandia, Luxemburgo, Vietnam, China, Albania y el último, que tuvo lugar el pasado 16 de mayo en Irak, hasta donde fue para asistir a la XXXIV Cumbre de la Liga de Estados Árabes.