Un policía acaba en la UCI tras recibir una paliza al intentar evitar un delito cuando estaba fuera de servicio

Un agente de la Policía Nacional de Elche permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General tras ser víctima de una salvaje agresión cuando intentaba impedir un posible delito en plena calle. El suceso ocurrió cuando el policía, que se encontraba fuera de servicio y regresaba a su domicilio, observó a dos individuos manipulando una motocicleta en la calle Clara Campoamor. Al tratar de intervenir, fue atacado brutalmente por los sospechosos, quienes lo golpearon hasta dejarlo inconsciente en el suelo.

El agente sufrió una paliza de extrema violencia. Según la información publicada por el sindicato Jupol, los agresores no solo lo golpearon a puñetazos, sino también con piedras, causándole heridas de extrema gravedad.

El parte médico refleja un diagnóstico demoledor: pérdida casi total de la dentadura, fractura de nariz, párpado destrozado, una fractura craneal, doce grapas en la cabeza y los pulmones encharcados. Ante la gravedad de las lesiones, los servicios de emergencia lo trasladaron de inmediato al hospital, donde permanece en estado crítico.

Según el sindicato, la situación actual del agente es grave, pero está consciente. Más adelante será traslado a un hospital especializado en cirugía maxilofacial, pero todavía no es posible hasta que se estabilice. «Está reventado. Literalmente le han estallado la cara, le han reventado el cráneo y lleva prácticamente toda la cara cosida. Le han dejado prácticamente sin dientes y le han fracturado también la nariz», ha detallado la portavoz de Jupol en una entrevista para los informativos de Telecinco.

Investigación como intento de asesinato

Jupol ha condenado con firmeza lo sucedido y ha solicitado que los hechos se investiguen como un intento de asesinato, no como una simple agresión. Aseguran que la violencia ejercida contra el agente demuestra una clara intención homicida, especialmente por el ensañamiento de los atacantes, que continuaron golpeándolo incluso cuando ya estaba en el suelo e inconsciente.

El sindicato ha anunciado que se personará como acusación particular en el procedimiento judicial tan pronto como se identifique y detenga a los responsables, quienes por el momento siguen en paradero desconocido. La Comisaría de Elche ha abierto una investigación para localizarlos y proceder a su detención.

Desde el primer momento, Jupol ha seguido de cerca la evolución del agente agredido y ha ofrecido todo el apoyo posible tanto a él como a sus familiares. La organización sindical insiste en que no se puede desvincular la agresión del hecho de que el agente actuó como policía nacional, aunque no estuviera en servicio. Según señalan, intervino para evitar un delito, cumpliendo con su deber incluso en su tiempo libre.

Jupol reclama que este ataque se considere también un atentado contra la autoridad, con todas las agravantes legales que ello conlleva. Además, exige al Gobierno de Sánchez medidas urgentes para reforzar la protección de los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, tanto dentro como fuera del servicio. Denuncian que este tipo de agresiones no pueden seguir tratándose con tibieza ni ser relativizadas desde las instituciones o el discurso político.

La portavoz del sindicato también ha recalcado que la actitud de Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, «es de desprecio absoluto a los policías nacionales y guardia civiles. Desprecio y abandono absoluto, parece que somos su enemigo». También considera que «no está a la altura» de su puesto como ministro y confirma que desde Jupol llevan tiempo pidiendo su dimisión «por esta y muchísimas causas más».

Desde el sindicato aseguran que no permitirán que esta agresión quede impune y que no cesarán en su empeño por lograr justicia. «Este compañero ha puesto en riesgo su vida por defender lo que juró proteger: la seguridad de todos. Ahora es el momento de que todos estemos a su lado, no solo con palabras, sino con hechos», han declarado.