Llegada de un cayuco al muelle de la Restinga, a 10 de enero de 2024, en El Hierro, Islas Canarias
Piden tres años de cárcel para un tuitero que tildó la inmigración como «invasión»
El acusado se enfrenta además a una multa de 3.600 euros y a la inhabilitación por un tiempo de seis años
Tres años de prisión por tildar la inmigración como «invasión». Es lo que pide la sección de delitos de odio de la Fiscalía Provincial de Valencia como pena para un tuitero que se expresó así en sus redes sociales y opina que «la integración no existe».
La fiscal, además, solicita el pago de una multa de 3.600 euros y la inhabilitación por tiempo de seis años para profesión u oficio educativo, en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre.
El delito que se le atribuye es el cometido con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizados por la Constitución.
Un supuesto delito en el que ha caído de la misma manera la presidenta de Cruz Roja en Tenerife, Mayte Pociello, quien en unas declaraciones recientes calificaba de «invasión» la llegada de migrantes a El Hierro y por las que ha tenido que desdecirse y pedir disculpas ante la polémica generada.
Los mensajes del acusado
Entre los meses de febrero y septiembre de 2022, el acusado publicó en sus cuentas de Twitter y Facebook diversos mensajes en los que calificaba la inmigración como una invasión, atribuía falsamente delitos contra las mujeres europeas y otros delitos violentos y se despreciaban las políticas de inmigración.
En esos mensajes, el acusado advertía de un supuesto peligro de sustitución de la identidad europea por otras ajenas, utilizando para ello expresiones ofensivas y humillantes hacia dicho colectivo, encaminadas a propagar el desprecio, la hostilidad y la animadversión hacia los mismos, según la misma calificación fiscal.
Entre los 'tuits' que transmitían este mensaje se encontraba alguno como el del 22 de febrero que decía –en valenciano–: «La integración no existe. Lo que se llama integración es la coexistencia temporalmente pacífica en un determinado territorio de comunidades de origen diferente y, por tanto, pertenecientes a paradigmas histórico culturales diferentes que tienden al conflicto entre ellas».
En otro mensaje, decía: «Dijimos que la inmigración era una invasión (así es). Dijimos que íbamos a un conflicto etno-racial en Europa (aquí lo tenemos). Decimos que la única forma de salvar Europa será ganar este conflicto (para eso nos preparamos)».
Y agregaba: «Se habla de 'guetos' de inmigrantes en Europa occidental, es otra fantasía mediática para esconder la verdad. No son guetos, es algo mucho peor. Los guetos eran donde se recluía a la gente que se excluía de la vida social».
En mayo, en otro mensaje, señalaba: «Los barrios ocupados por inmigrantes en Europa occidental son territorio conquistado y desde el cual se expanden violentamente hacia el resto de la ciudad o del país con voluntad de dominio. Hay que ver la realidad en toda su crudeza».
Además, escribía: «Boris Jhonson elimina a los europeos y los sustituye por asiáticos. Ese era el objetivo del Brexit, hacer UK cada vez más multi-racial. Y algunos creían que Jhonson -un hombre de la city- iba a defender la identidad británica. Increíble que aún no se vean las cosas como son».
En un mensaje más, decía: «La sustitución de la población autóctona europea por masas inmigrantes tercermundistas supondrá una decadencia social, económica, intelectual y científica irreversible»; y concluía en junio: «Estar a favor de la inmigración legal que se 'integra' (sic) es estar a favor de la sustitución demográfica de los europeos».
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