La Navidad de Abel Caballero
El silencio de la izquierda ante el despilfarro antiecológico de la Navidad de Caballero
El alcalde de la ciudad olívica desafía cada año la crisis energética con millones de luces LED por las calles, decora cada metro cuadrado y corona estas fiestas con un árbol en la Puerta del Sol que este 2025 alcanza los 45 metros de altura
Vigo celebra este sábado su día grande. Al menos el de Abel Caballero. A las ocho de la tarde, el alcalde de la ciudad olívica dará el pistoletazo de salida a la Navidad con el encendido de doce millones de luces LED repartidas por toda la ciudad, un árbol que este año alcanza los 45 metros de altura más otros nueve de la estrella que lo corona, un mercadillo y un sinfín de actividades para hacer de Vigo la capital de la Navidad. O eso dice él. Una auténtica locura de despilfarro antiecológico y de dinero para apenas un mes y medio de fiestas.
No hace suyo ese dicho de menos es más porque cada año se supera. Es tal su obsesión que la colocación de las luces empieza en julio, el mes destinado a las sombrillas y a los chiringuitos de playa. En medio del calor asfixiante que asola España, Caballero da el pistoletazo de salida a su época favorita del año. Casi le compensaría más dejarlas puestas.
Dejando de lado la obsesión de Caballero por la Navidad, resulta extraño que ante este despilfarro, los de la izquierda se queden pasmados sin decir absolutamente nada, optando por un silencio y dando por bueno los principios con los que machacan día tras día a los partidos políticos rivales.
Si esa misma Navidad de Caballero la hiciese un regidor de la derecha, les faltaría salir a la calle para clamar contra este derroche energético. Pero ya se sabe que no predicen con el ejemplo y, en su caso, hacen todo lo que le critican al resto.
La capital de la Navidad
El alcalde ha vuelto a invitar «a todo el mundo, de toda España, de toda Europa y de todo el planeta» a disfrutar del espectáculo que da inicio a una campaña navideña que se extenderá hasta mediados de enero. Serán casi doce millones de luces LED instaladas en 460 calles y unos 7.000 motivos ornamentales, entre ellos grandes figuras en 3D, abetos luminosos, un belén monumental, la gran noria de Arenal y los mercadillos los que llenarán la ciudad de vida y color, aunque no tanto de ruido.
Entre las novedades destaca Vialia on Ice, un nuevo mercado navideño en la terraza del centro comercial Vialia con 75 casetas, dos pistas de hielo (una infantil y otra para adultos), un tobogán de trineos neumáticos y un tren infantil. Además, la Alameda de Bouzas acogerá otro mercado con una veintena de casetas, organizado por la Asociación de Amigos de la Historia de Bouzas, mientras en Samil volverán a instalarse la pista de hielo y el circuito de karts.