El alcalde de Lugo, Miguel Fernández, con la edil María Reigosa
Crisis política en Lugo: la dimisión de una concejala podría dejar en minoría al bipartito PSOE-BNG
María Reigosa, que ha dimitido de su cargo en Medio Rural por, entre otras razones, diferencias con el alcalde socialista Miguel Fernández, podría pasar a ser concejala no adscrita y abandonar al PSOE
Una nueva crisis sacude el Ayuntamiento de Lugo, que vive un mandato marcado por la inestabilidad y las polémicas. Con tres alcaldes ya en el historial de esta última legislatura, a esta situación se le suma un nuevo problema: la dimisión de la concejala María Reigosa por diferencias con el actual regidor, Miguel Fernández.
La ingeniera de caminos aterrizó en la corporación el pasado mes de octubre tras el fallecimiento de Pablo Permuy, asumiendo la concejalía de Medio Rural. Sin embargo, poco más de un mes después, Reigosa ha decidido renunciar a su puesto y a la asignación económica.
La principal razón esgrimida es la dificultad de conciliar su actividad profesional con la gestión municipal, sumado a las trabas y la falta de medios que, según denuncia, ha encontrado en el Ayuntamiento para desarrollar su labor.
Su dimisión podría tener consecuencias aún mayores. Fuentes municipales no descartan que la concejala, a raíz de sus diferencias con el alcalde, decida abandonar el grupo municipal socialista y pasar a ser edil no adscrita. Este movimiento desequilibraría por completo el actual Gobierno local, formado por el PSOE y el BNG, sumiéndolo en una crisis aún más profunda.
Hasta la fecha, los socialistas cuentan con ocho actas, y el BNG, con cinco, conformando una cómoda mayoría absoluta frente a los doce ediles del PP. Reigosa podría dejar a la coalición con 12 concejales, empatando con los populares, lo que significaría que el Gobierno de Miguel Fernández ya no tendría la mayoría absoluta y estaría en clara desventaja.