Vista de Torrejón de la Calzada
Torrejón de la Calzada en jaque por okupas: «Llevan 15 años vendiendo droga, coches y cobran por tirar la basura»
Hace 15 años un clan gitano se asentó y ha levantado naves de pladur y viviendas para poder vivir
Más de 400 plantas de marihuana intervenidas en unas naves de Torrejón de la Calzada
El municipio madrileño de Torrejón de la Calzada está en el punto de mira debido a la inseguridad que se vive por parte de una comunidad gitana que se instaló en una finca hace ya 15 años. A finales de febrero la Guardia Civil intervino 63 kilos de cogollos dispuestos para su venta y 405 plantas de marihuana en este enclave. Dos personas fueron detenidas por delitos de quebrantamiento de la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.
La finca es propiedad de dos familias que la heredaron tras la muerte de sus progenitores. Hace 15 años llegó un clan gitano dirigidos por un patriarca y se asentaron en esta zona. La comunidad ha levantado naves de pladur y viviendas para poder vivir.
Una de las propietarias de la finca ha explicado a El Debate que «debe de haber viviendo unas cien personas que durante todo este tiempo se han dedicado, y siguen haciéndolo, a vender coches ilegales y droga. Además, hay un vertedero por el que cobran a los vecinos para poder tirar la basura».
En este sentido, la mujer remarca que esta finca depende tanto del municipio de Torrejón de la Calzada como de Cubas de la Sagra. «Antes los ayuntamientos estaban gobernados por distintos partidos políticos, uno del PP y otro del PSOE, pero ahora ambos son del PP y no hacen nada».
La redadas de la Guardia Civil en esta finca es algo habitual ya que la mujer relata que «en una ocasión fue con otra persona a ver la finca y la Benemérita les obligó a que se fueran porque estaban en medio de una redada antidroga».
Imágenes de la plantación localizada en Torrejón de la Calzada
Detención de dos mujeres
El pasado 26 de febrero agentes de la Guardia Civil detuvieron a dos mujeres en esta finca por tener 63 kilos de cogollos dispuestos para su venta y 405 plantas de marihuana.
Esta operación comenzó el 12 de febrero cuando la Benemérita se acercó a este lugar y empezaron a sospechar al ver una actitud «vigilante y esquiva» de las personas que se encontraban en el pabellón.
De manera inmediata los agentes del Área de Investigación realizaron dos registros domiciliarios, y se encontraron el meollo de este asunto. Unas enormes plantaciones de marihuana con todos los elementos necesarios para garantizar su cultivo, crecimiento y recolección.
Dos mujeres de nacionalidad española de 29 y 40 años resultaron detenidas por el delito contra la salud pública. Además, se localizó también un punto de toma de luz ilegal a la red de tendido eléctrico general de la localidad con la que podían preservar el buen estado de las plantas.
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