Pinchazo del PSOE en su fiesta «clandestina» por el Dos de Mayo en el Parque del Oeste

El PSOE de Madrid apenas ha logrado congregar a algo más de 300 personas en su acto por el Dos de Mayo, calificado por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso como «clandestino». Un evento que los socialistas decidieron montar hace días en respuesta al veto de Sol al Gobierno de Pedro Sánchez de los actos institucionales por su prohibición de que desfilara el Ejército.

El Ejecutivo autonómico decidió no cursar invitación ni a Pedro Sánchez, ni a ninguno de sus ministros, y tampoco al delegado del Gobierno, Francisco Martín. En respuesta, el PSOE-M anunció el pasado domingo que tampoco asistiría al evento y que organizarían su propia fiesta en La Rosaleda del Parque del Oeste. Y así ha sido.

El secretario general del PSOE de Madrid y ministro para la Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, ha estado acompañado por su número dos, Pilar Sánchez Acera, por el ministro de Presidencia, Félix Bolaños y por la portavoz socialista en la Asamblea, Mar Espinar, así como por un puñado de militantes y simpatizantes del PSOE que no sumaban más de 400 personas. Por el contrario, en la Puerta del Sol se han dado cita, entre invitados, público y prensa, más de 1.500.

En declaraciones a los medios de comunicación antes de entrar al acto, que ha tenido lugar en el interior de un pabellón, López ha censurado «el sectarismo» de la presidenta regional mientras que ha defendido que su fiesta es «abierta a todos los madrileños».

Una fiesta que ha estado amenizada por un grupo de música con batería y guitarra y en el que los asistentes han degustado bebidas y un picoteo, todo servido en vasos de plástico en un espacio que, según fuentes presenciales, era limitado para la gente que había por lo que daba sensación de apiñamiento.

Dentro del pabellón ha tomado primero la palabra Bolaños, quien ha asegurado que en 2027 Madrid tendrá un presidente «alegre, respetuoso y solidario», en referencia a López, a pesar de que las últimas encuestas conocidas este mismo viernes otorgan a Isabel Díaz Ayuso una holgada mayoría absoluta si hubiera comicios autonómicos a día de hoy.

Además, el ministro ha presumido de que fue el Gobierno el que «gestionó la crisis eléctrica en Madrid» y otorgo a todas las comunidades, incluida la capitalina, «medios materiales y humanos».

Por su parte, el secretario general del PSOE-M -que a su entrada al pabellón ha bromeado con el mal tiempo que le ha hecho a Ayuso en su acto, mientras que justo cuando ha dado comienzo el suyo ha comenzado a lucir el sol-, ha defendido, de nuevo, que su fiesta era «para todos y todas», a pesar de que los asistentes eran en su mayoría personas vinculadas al Partido Socialista.

Por otra parte, López ha hecho alusión a sus declaraciones virales de ayer, en las que se dirigió airadamente a todos los «fachas y ultras de este país» y ha defendido que le salió «del alma y del corazón» para, a continuación, repetir sus palabras. «Lamento comunicar a todos los fachas y todos los ultras que España tiene un Gobierno de izquierdas y va a seguir teniendo un Gobierno de izquierdas», ha lanzado.