El nº2 de Ayuso avisa: «Barcelona no va a ser la capital de España con el dinero de Madrid»

El secretario general del Partido Popular de Madrid, Alfonso Serrano, ha avisado este miércoles de que «Barcelona no va a ser la capital de España con el dinero de Madrid», en referencia a las intenciones que podrían tener Pedro Sánchez y sus socios independentistas de cara a la Conferencia de Presidentes que se celebra este viernes en la Ciudad Condal.

El número dos de Isabel Díaz Ayuso al frente de los populares de la región capitalina ha protagonizado hoy un desayuno informativo, al que también ha acudido la presidenta autonómica, en el que ha sentenciado que la Conferencia de Presidentes «no puede convertirse en una fiesta de Ábalos en un Parador Nacional para que Illa se lleve el dinero de Madrid». «Los independentistas catalanes no pueden destrozar las habitaciones de España para llevárselo para sus sobrinas», ha agregado, continuando con la metáfora.

«Los socialistas no pueden crear un país llamado Cataluña: propuesta que nunca pasaron por las urnas», ha clamado Serrano, quien ha dejado claro que no no se fía de lo que va a hacer Pedro Sánchez en ese encuentro y, en todo caso, ha advertido que los presidentes populares no se van a prestar en ningún caso a «bailar una sardana en homenaje a Illa» como, teme, pueden querer hacer los socialistas.

En ese mismo sentido se pronunció ayer Díaz Ayuso en una entrevista en Telemadrid en la que declaró que no se puede hacer «ni media cesión al independentismo» en esa reunión que, en otras ocasiones, lamentó, han servido «para que el presidente el día antes o esa misma mañana la desguace con dos anuncios de concesiones a sus socios». Unos socios que, denunció la dirigente regional, «tienen un proyecto desde hace décadas para demoler la Transición porque quieren una España dividida y porque quieren imponer una república federal laica desde hace mucho tiempo».

Por su parte, Serrano ha incidido este miércoles en que «por primera vez un jefe de Gobierno renuncia a unir al país y basa su estrategia política en la división emocional de la sociedad». «Sánchez practica desde las instituciones públicas la deslegitimación moral de una parte de la sociedad española. Gobierna solo para la mitad del país… y cada vez más contra la mitad del país», ha criticado.

«Carece de una mayoría legislativa para gobernar y sólo puede ofrecer una suma decadente y menguante junto a quienes tienen como objetivo político la destrucción de la nación. El mandato de Sánchez se recordará por instalar a nuestro país en la decadencia y la mediocridad», ha apostillado.