Camisa de mujer con botones
Los botones de las camisas: ¿izquierda o derecha?
En el Medievo se podía juzgar la clase económica y social de una señora por su colocación en la prenda
Muchas de las razones por las que nos vestimos con el guardarropa actual son a veces peregrinas y en otras ocasiones fruto de antiguas costumbres. Quizás uno de los detalles más extraños del vestuario occidental es que las blusas femeninas llevaban los botones en el lado izquierdo, mientras que las camisas para ellos los llevan a la derecha. ¿Por qué es esto así?
Camisa de botones
Antiguamente, el lado en el que estaban los botones era como la declaración de la renta: permitía conocer la situación socioeconómica de la persona. A las señoras de clase alta las vestía una doncella y era más cómodo para una persona diestra abrochar los ojales si los botones estaban a la izquierda. De vestirse una misma, sería más bien al revés.
Botones de camisa
Con respecto a las camisas para hombre, los botones se encontraban normalmente situados a la derecha, y de este modo ellos podían desabrocharse con la mano izquierda aunque estuviesen usando la derecha para llevar las riendas de caballo o incluso para desenvainar y blandir la espada en caso de necesitar defenderse.
Camisa de Brunello Cuccinelli
Su evolución
A modo de curiosidad, recordemos que los botones existen desde la prehistoria, si bien en aquel entonces estaban hechos de trozos de huesos. En el Medievo comenzaron a ponerse de moda los botones hechos de piedras preciosas, de espejos, de Metal, plata o nácar. En el Renacimiento se utilizaban botones bordados, tapizados, hechos en oro e incluso a base de perlas.
Duelo en el Bois de Boulogne en 1874
El uso del botón como motivo decorativo comenzó a ponerse de moda en el siglo XIII, ya que hasta entonces los recursos eran escasos sobre todo entre las clases más acomodadas. Los menos afortunados, zurcían la ropa, cosían con tino y llevaban pocos ornamentos. Por eso la moda sigue pareciendo algo lujoso, cuando hoy día el que más arreos lleve encima suele ser el menos elegante. Por el momento, ellas a la izquierda, ellos a la derecha. Cosas de la vida. Cosas de la historia.