Se divorció de Enrique Ponce y, poco después, este comenzó su relación con Ana Soria
Gente
El (im)posible compromiso de Paloma Cuevas
Coloquemos en una balanza la inestabilidad frente al conservadurismo, la madre coraje contra el padre desapegado
Al famoso le gusta comunicar por redes sociales sus cuitas, excepto que se deba a una revista, en ese caso el día de comunicados es el miércoles. Mientras esperamos las declaraciones exclusivas de Paloma en su revista, analicemos la situación con la ayuda de Lizzet López que, desde México, nos ayuda a entender a los personajes y luego que cada cuál decida.
El jueves 29 de septiembre, un periodista mejicano, Gustavo Adolfo Infante, afirma que el cantante, Luis Miguel (52) y Paloma Cuevas (50), se han comprometido y que incluso hay anillo.
En México no parece impresionar el anuncio, al cantante, apodado El Sol, ya lo han comprometido más de treinta veces, Genoveva Casanovas fue una de ellas. Quizás la afirmación del cronista mejicano, al cruzar el océano con la fuerza de un ciclón, nos ha llegado convertido en huracán tropical fuerza 9. Y lo hace en plena resaca de los dos compromisos aristocráticos mas cortos de la historia. En unos días hemos visto que los dos anillos que lucían las dos marquesas de Griñón, la viuda con un diseño clásico de zafiros y brillantes y la titular, con tres brillantitos, han vuelto a sus cajitas. De ahí que no haya trascendido cómo es el de Paloma Cuevas, en el que caso de que exista.
Si centramos la atención en el perfil de Paloma Cuevas, a quien hemos visto durante casi veinticinco años como esposa e hija ejemplar, nos encontramos con que su manera de entender la vida es la búsqueda de equilibrio y la estabilidad convencional.
Nadie duda de que Paloma es madrina de Miguel Gallego Arámbula (15), el hijo mayor del cantante. Lo ha confirmado Victoriano Valencia, quien ha dedicado múltiples halagos a Luis Miguel en una entrevista a pie de calle publicada por la revista Semana. Eso demuestra la relación de estrecha amistad que existe entre ambos.
Paloma Cuevas durante la llegada a los premios `Mujer de Hoy´
Las niñas Ponce Cuevas han crecido junto a sus padres bajo una crianza tradicional, inmersas en un entorno familiar, y fueron la principal preocupación de Paloma al divorciarse. Además del valor que Cuevas le da a la fidelidad, los votos del matrimonio y la familia. Puede que con la edad y la experiencia la lleven a tomar otras riendas, que todo puede ser.
En el extremo opuesto está la interminable colección de parejas de Luis Miguel, que nunca se ha casado. El Sol de México es padre de Michelle Salas (33), la primogénita fruto de su relación juvenil con Stephanie Salas, nieta de Silvia Pinal, actriz del cine de oro mexicano; y de Miguel y Diego (14 y 15), hijos que comparte con la actriz Aracely Arámbula.
A Michelle no la ha reconocido como hija, aunque convivió de forma intermitente con ella siendo pequeña, hasta que cumplió los dieciocho años que se instaló con su padre en Miami. Con los niños se comportó distinto: portada y reportajes en la revista de cabecera de Paloma Cuevas dejaron testimonio de que Luis Miguel, por fin decidía formar una familia; pero el cuento de hadas duró poco porque, como dice el refrán: la cabra tira al monte. El Sol retomó su vida de soltero sin compromisos. A día de hoy, Luis Miguel al parecer, vive sin contacto alguno con sus tres hijos.
El rasgo más representativo de la personalidad del cantante mexicano es la inestabilidad y el secretismo con el que ha blindado su entorno y sus relaciones amorosas; llegó a decirse que sus parejas suscribían acuerdos de confidencialidad. Esa desconfianza tiene un origen en la dolorosa desaparición de su madre a finales de la década de los ochenta, y la conflictiva relación con su padre, Luisito Rey.
Coloquemos en una balanza la inestabilidad frente al conservadurismo, la madre coraje contra el padre desapegado y consideremos si Paloma y Luis Miguel llegarán al juzgado civil con anillos prometiéndose amor y fidelidad eternos.
Comentarios
