La Hacienda San José, la finca sevillana que Bertín Osborne ha hipotecado para frenar su ruina económica

«Tiene millones de euros de deuda con los bancos, una hipoteca que acaba en 2050 y 40.000 euros de intereses al mes para hacer frente a esas deudas». Con estas palabras, Luis Pliego, director de la revista Lecturas, avanzaba el reportaje que confirmaba que Bertín Osborne está «en bancarrota».

La mala situación financiera del cantante habría motivado, de hecho, su fichaje por Tu Cara Me Suena, el programa de Antena 3 donde famosos imitan a otros artistas y cuya remuneración suele oscilar entre los 10.000 y 25.000 euros. «Necesita ese trabajo porque, a pesar de tener un considerable patrimonio, Bertín está ahogado por las deudas y necesita ganar dinero», comentan en la revista.

Su último varapalo ha llegado en forma de bebé. Pese que, al principio ni lo reconocía ni quería hacerse cargo de él, la justicia le ha dado la razón a Gabriela Guillén y ha confirmado que, efectivamente, es el padre de la criatura. Aunque ella no desea que lleve su apellido, sí desea la manutención mensual que le corresponde y que, de momento, no ha visto. Todavía les queda negociar qué importe económico recibirá como pensión, pero, si es de carácter retroactivo —establecido en el artículo 148 del Código Civil—, deberá pagarle la cantidad establecida desde que impuso la demanda de paternidad.

De esta forma, a pesar de sus brillantes cuatro décadas como cantante y su éxito como presentador en Mi casa es la tuya, se enfrenta a desafíos económicos tan considerables que se ha visto obligado a hipotecar la que será su herencia: su adorada finca sevillana de 49 hectáreas y 2.100 cuadrados. Bajo el nombre de Hacienda San José, es la propiedad más valiosa y con un significado sentimental profundo para él.

Y no solo porque la utilizaba como set de grabación de su programa de entrevistas en Telecinco. Este entorno repleto de olivares, cuadras para caballos y diversas instalaciones para caballos han sido el escenario en el que ha pasado junto a su familia algunos de los momentos más significativos de su vida.

Situada en la localidad de Alcalá de Guadaíra, a tan solo unos kilómetros de Sevilla, esta antigua almazara construida en 1976 cuenta a día de hoy con hasta seis edificios interconectados con todo lujo de comodidades, desde salones majestuosos, amplios comedores, una bodega, una capilla, un gimnasio con set de boxeo y un jardín que alberga una piscina y una pista de pádel. Además, también posee una casa de invitados para alojar a huéspedes que le visitan y otra para los guardeses y encargados del mantenimiento de la propiedad además de una cuadra con 14 boxes para caballos y varias naves para el ganado.

El estilo rústico predomina en la mayoría de las estancias, especialmente en los distintos salones de la casa, donde las vigas de madera combinan a la perfección con sillas de montar a caballo en las paredes y tonos tierra propios de Andalucía. El gran contraste lo podemos encontrar en la zona de la cocina, donde el diseño opta por toques de mármol y tonos azulados claros.

Según los registros de Idealista, en abril de 2014 la propiedad fue listada por 8 millones de euros, pero no se concretó la venta. El paso del tiempo y que no haya encontrado comprador en estos años ha provocado una considerable reducción en el valor de la finca. De hecho, la ha hipotecado por 4,3 millones de euros, la mitad de su precio inicial. Bertín Osborne la adquirió hace más de 30 años pidiendo dos préstamos. Tal y como recoge Lecturas, se vio obligado a hacer una ampliación para lograr fondos con los que poder hacer frente al gasto mensual. Al no poder costearlo, no ha visto otra vía posible para salir adelante que hipotecarla.