El presidente ruso, Vladimir Putin, sostiene un pez que capturó durante un mini descanso en la región siberiana de Tyva.
Rusia acusa a una periodista de ser un objeto sexual enviado para distraer a Putin
La prensa oficialista sugiere que Hadley Gamble forma parte de una operación orquestada por Estados Unidos para perjudicar al mandatario ruso
Los medios estatales rusos han acusado a la periodista Hadley Gamble de actuar «como un objeto sexual» para distraer al presidente Vladimir Putin. Incluso han sugerido que Gamble forma parte de una operación especial orquestada por el gobierno de Estados Unidos.
Gamble acaparó las portadas de varios medios después de que entrevistase a Putin en Moscú durante una ponencia a la que asistió en la Semana de la Energía de Rusia.
Antes de subir al escenario, el líder ruso, de 69 años, fue captado por las cámaras cuando le hacía carantoñas a la mujer. De hecho, el propio Putin sugirió que Gamble era «demasiado hermosa» para entender algunas de sus respuestas.
La periodista Hadley Gamble
Pero los medios de comunicación rusos han ido un paso más allá y han acusado a Gamble de formar parte de un complot para distraer al mandatario ruso. Del mismo modo que supuestamente ellos utilizaron a una atractiva intérprete rusa con el fin de despistar a Donald Trump durante una reunión de 2019.
El soviético Vladimir Soloviev dijo en su espacio de radio que Gamble distrajo a Putin con su «atractivo sexual» y actuó «como si estuviera en la película 9 semanas y media o Instinto básico».
Aceite en las piernas
Por su parte, Dmitry Kiselyov insistió en el programa de televisión Vesti Nedeli que la reportera actuó «con descaro» y que «le puso ojitos» al presidente Putin, según recogen diversos medios locales.
Hadley Gamble
Kiselyov llegó a referirse a Gamble como «su instinto básico» ya que movía provocativamente las piernas como hacía Sharon Stone en la película. Gamble «trabajó su lenguaje corporal al máximo», prosiguió. «Jugó constantemente con su pelo, se relamía los labios y enseñaba la lengua».
«Hadley lució un vestido negro ajustado y se puso un par de zapatos de tacón alto de Louboutin que alargaban sus piernas», afirmaba Kiselyov, añadiendo que las piernas de la periodista estaban «cubiertas de aceite».
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