Infografía del sistema de blindaje reactivo Kontakt 5
Máscaras, blindajes y escudos protectores de los tanques rusos en Ucrania
Los tanques rusos ejercen de columna vertebral de la ocupación ucraniana y para protegerlos de los cohetes antitanque emplean un sofisticado blindaje
Los veteranos tanques de origen soviético T 72 están protagonizando la invasión rusa de Ucrania. La versión modernizada de este tanque con más de 50 años de historia, el T 72 B3 con la característica Z blanca pintada, se ha convertido en la imagen más representativa de este conflicto junto con los modernos y sofisticados T 90.
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Los T 72 B3 y T 90 constituyen la columna vertebral del avance ruso, pero también se han mostrado como vehículos vulnerables ante las tácticas de guerra de guerrillas empleadas por un ejército inferior, el ucraniano, que ha tirado de ingenio para hacer frente al todopoderoso ejército ruso.
Blindaje reactivo Kontakt 5
Ante las características de la guerra los vehículos rusos están recurriendo a peculiares métodos de camuflaje y de blindajes, unos más sofisticados que otros. Desde disimular los blindados y tanques en las zonas boscosas cubriéndolos de ramas secas, a pintarlos con moteados de pintura blanca para camuflarlos entre la nieve.
Sin embargo, frente a las amenazas que suponen los cohetes antitanque Javelin, Stinger o NLAW esgrimidos por la resistencia ucraniana, que han dejado un reguero de vehículos rusos carbonizados en todos los frentes, los rusos han dotado a sus tanques con eficaces blindajes reactivos Kontakt 5.
Restos de un tanque ruso destruido con el blindaje reactivo
Este sistema de defensa contra cohetes antitanque, inventado en la Unión Soviética y mejorado por los israelíes en las guerras de Oriente Medio, es un audaz y peligroso sistema defensivo.
El temerario sistema consiste en cubrir el tanque con cartucheras, o «ladrillos», llenas de un explosivo que, al producirse el impacto del cohete enemigo, contrarresta la explosión de manera que reduce los daños en el tanque y aumenta las posibilidades de los soldados de sobrevivir al ataque.
Lanzacohetes antitanque empleados por Ucrania
Además, el sistema también incluye el lanzamiento de contramedidas para tratar de interceptar y destruir el misil antes de que se produzca el impacto.
El sistema, bastante eficaz, muestra, sin embargo, sus limitaciones, sobre todo ante la entrada en juego de forma masiva de los modernos cohetes antitanque esgrimidos por los ucranianos.
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El blindaje resulta vulnerable en la parte superior del tanque e ineficaz en caso de un segundo impacto en el mismo punto.
Desde el inicio de la invasión, el 24 de febrero, el ejército ucraniano asegura haber destruido 625 tanques rusos, una cifra que, de ser cierta, reflejaría un auténtico desastre de la ofensiva rusa.
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