Macron desplaza a Sánchez en Hispanoamérica y se erige como mediador entre Maduro y la oposición
La irrelevancia internacional del Gobierno de Pedro Sánchez ha llevado a que el vacio dejado en la región sea ocupado por los franceses
En vísperas de acoger la quinta edición del Foro por la Paz en París, la presidencia francesa indicó que Emmanuel Macron busca «reforzar los lazos» con una Hispanoamérica en «reconfiguración», «sobre todo con Argentina y Colombia».
El evento forma parte de una estrategia de política exterior del Gobierno de Macron y el encuentro de este año permitirá intensificar la cooperación internacional para «mitigar» las consecuencias socio-económicas de la crisis derivada de la pandemia de la covid-19 y de la guerra en Ucrania.
Precisamente los presidentes Gustavo Petro y Alberto Fernández participarán este viernes por la tarde en una mesa redonda dedicada a los «valores universales» y al diálogo Norte-Sur y en la que también estará el presidente francés.
Aunque no estará físicamente presente, el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, intervendrá por videoconferencia
Sin embargo, el hecho más significativo para la influencia francesa en la región, será la celebración de contactos en París entre representantes del régimen de Nicolás Maduro y de la oposición venezolana para intentar desbloquear el diálogo político en Venezuela, señalaron fuentes del Elíseo.
«Estaré encantado que podamos hablar más tiempo, que podamos emprender un trabajo bilateral útil para la región», dijo Macron a Maduro tras encontrarse el pasado lunes en la Cumbre del Clima en El Cairo. «Presidente (...), yo lo llamaré» le contestó entusiasmado el dictador sudamericano en lo que representó el primer contacto desde que Francia reconoció la presidencia interina del opositor Juan Guaidó.
Entre esperanzas y estratagemas
La dictadura de Maduro y la oposición venezolana comenzaron un diálogo en agosto de 2021 en México, pero quedó suspendido poco después por decisión del régimen en «señal de protesta» por la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano Álex Saab testaferro del dictador chavista.
El miércoles por la noche la delegación de la oposición venezolana liderada por el bloque antichavista Plataforma Unitaria anunció que asistirá este viernes a París, donde «dará su visión sobre el proceso de negociación en México».
El jefe del equipo negociador de la oposición, Gerardo Blyde, aseguró que insistirá en la «importancia de obtener resultados de forma urgente que permitan atender la crisis social y política sin precedentes» que atraviesa el país sudamericano.
Blyde señaló que el objetivo del encuentro es «apoyar» el diálogo para intentar desbloquear el actual callejón sin salida y lograr la celebración de «elecciones justas y transparentes» en Venezuela.
«Francia se está acercando»
Desde que asumió la presidencia de Francia, Macron sólo viajó una vez a Hispanoamérica en ocasión del G20 de Argentina en 2018, pero la victoria de Lula en Brasil y sus esfuerzos para mediar en Venezuela podrían permitirle mirar hacia la región.
La región tiene en la Unión Europea (UE) su tercer socio comercial, por detrás de Estados Unidos y China, con 176.000 millones de euros de intercambios en 2020, según la Fundación EU-LAC.
Hasta ahora Macron se mostraba indiferente hacia la región, más centrado en Europa, África y el Indo-Pacífico, pero la guerra de Ucrania y la crisis energética en Europa podría estar redireccionando sus intereses.
La presidencia francesa llamó el 27 de junio a «diversificar las fuentes de abastecimiento de petróleo» durante la cumbre del G7 en Alemania, mirando hacia la producción de Irán y Venezuela. «El petróleo venezolano también debe poder volver al mercado» señaló el Elíseo en aquel momento.
Los monopolios galos, exhaustos
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Ahora, en un contexto de «cambio político grande», como en Brasil, Chile o Colombia, «Francia que estaba bastante alejada de América Latina se está acercando», aseguró a Afp la diputada oficialista Éléonore Caroit.
«Macron no debería desperdiciar esta oportunidad. Creo que debería ir a la toma de posesión de Lula el primero de enero y hacer que Francia esté de regreso en América Latina», aseguró a la Afp el politólogo Gaspard Estrada.
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