Varios ciudadanos marroquíes recogen los escombros que ha dejado el terremoto
Se agota la esperanza de hallar más supervivientes del terremoto en Marruecos
Las operaciones de rescate continúan, pero cada vez hay menos opciones de encontrar gente con vida entre los escombros
Mohamed VI reaparece cuatro días después del terremoto que azotó Marruecos
Las operaciones de rescate continúan en Marruecos cinco días después del devastador terremoto que ha dejado más de 2.900 muertos. Sin embargo, estas cifras podrían aumentar en las próximas horas, pero lo que ya parece complicado es encontrar más sobrevivientes. Las esperanzas se agotan a medida que va pasando el tiempo.
La Cruz Roja lanzó el martes un llamamiento para obtener fondos de alrededor de 100 millones de euros para apoyar las operaciones de socorro. El sismo dejó también 5.530 heridos, según el último balance oficial, por lo que en estos momentos hay mucha gente hospitalizada y Marruecos ha solicitado la ayuda de equipos extranjeros.
Voluntarios y rescatistas marroquíes, con ayuda de equipos extranjeros, están tratando de acelerar la búsqueda para encontrar posibles sobrevivientes y dar refugio a cientos de familias que han perdido sus hogares. Sin embargo en algunas áreas aisladas, los residentes afirman que les han dejado solos.
En el pueblo de Douzrou, a 80 km al suroeste de Marrakech (centro) y destruido por el terremoto, se lee la preocupación en los rostros de los sobrevivientes, que viven en refugios improvisados. Un centenar de personas han muerto en este pueblo situado al comienzo de las cordilleras del Alto Atlas, según los residentes.
«Es importante que nos cuiden, no podemos sobrevivir en la naturaleza por mucho tiempo. Las condiciones climáticas son muy duras. Tememos lo peor con el invierno que se avecina», dijo Ismail Oubella, de 36 años, que ha perdido a tres hijos de 3, 6 y 8 años, a su esposa embarazada y a su madre.
La ayuda internacional
Un equipo de 20 rescatistas del United Kingdom International Search and Rescue Team (UK-ISAR) llegó a la zona. «Los habitantes han manejado la situación, pero desplegaremos perros para ver si hay algo debajo de los escombros», comentan sin demasiada esperanza de que se puedan encontrar más personas con vida.
Misma situación ha ocurrido con los españoles desplazados hasta Marruecos. Los efectivos mandados por la ONG española Bomberos Unidos sin Fronteras (BUSF) hasta las zonas afectadas por el terremoto del pasado viernes decidieron ya volver a España sin esperanza de hallar supervivientes. «Nosotros esta noche regresamos. Con la seguridad de que no van a aparecer personas vivas, nuestro trabajo ha terminado», explicó el presidente de BUSF en Huelva, Antonio Nogales.
Quien seguirá por el momento desplegada es la Unidad Militar de Emergencias (UME) española, que este martes estaban en Talat N'Yakoub para buscar un posible superviviente.
Hospitales de campaña
El ejército marroquí ha establecido hospitales de campaña para tratar a los heridos en áreas sin litoral, como en la aldea de Asni, en la provincia de Al-Haouz, a poco más de una hora de Marrakech. Más de 300 pacientes ya han sido ingresados allí, dijo el médico coronel Youssef Qamouss.
El terremoto alcanzó una magnitud de 7 según el Centro Marroquí de Investigación Científica y Técnica (6,8 según el Instituto Geofísico Americano, USGS) y es el más potente que se haya medido en Marruecos.
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