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19 de mayo de 2024

La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni

La primera ministra de Italia, Giorgia MeloniAFP

Italia se mira en el espejo de España y da un paso decisivo para transformarse en un Estado autonómico

Al revés de lo que sucede en España, en Italia es la derecha la que defiende una mayor autonomía para las regiones y la izquierda un Estado más centralista

Italia ha dado su primer paso para reformar la Constitución y convertirse en un Estado de las autonomías similar a España.
La mayoría parlamentaria de derechas, conformada por los tres partidos que sostienen al gobierno de Giorgia Meloni, Fratelli d’Italia, Forza Italia y La Lega, aprobaron en el Senado una proposición de ley para desarrollar el artículo 116 de la Constitución italiana, que permite ceder competencias, y descentralizar el Estado dando autonomía a las regiones.
De esta manera, Italia se mira en el espejo de España, aunque, a diferencia de lo que ocurre en nuestro país, las fuerzas políticas italianas que defienden las autonomías regionales son las de derechas, mientras que las izquierdas defienden un Estado centralizado y unitario.
De hecho, la oposición de izquierdas criticó a la primera ministra Meloni por querer dividir Italia. «Quiere pasar a la historia como la primera ministra que dividió Italia», criticó la líder del socialista Partido Democrático, Elly Schlein.
«Meloni rompe el país y vende el sur a Salvini», criticó el líder del izquierdista Movimento 5 Stelle, Giuseppe Conte, y es que la descentralización ha sido una larga demanda de Salvini y de La Lega desde que el partido conservador se llamaba Lega Norte y se presentaba sólo por las regiones separatistas del norte de Italia.
El proyecto, de salir adelante, ya que aún tiene que pasar por la Cámara de Diputados, se aplicaría de forma progresiva. Aún queda por definir qué competencias se podrán descentralizar y si la descentralización será igual para todas las regiones o si habrá diferentes niveles de autonomía en función de las aspiraciones de cada región.
Lo previsible es que en una primera fase se aprueben unas 23 competencias del Estado sensibles de ser descentralizadas.
Esas competencias afectarían a materias relacionadas con la sanidad, la educación, actividades deportivas, transporte, cultura y comercio exterior.
La votación del proyecto de Ley dejó una estampa sorprendente en la cámara del Senado. Para protestar por la descentralización, los senadores de izquierdas se pusieron en pie y comenzaron a entonar el himno de Italia ondeando banderas tricolores: «Fratelli d’Italia, l’Italia s’è desta…».
Los senadores de la bancada de la derecha, sobre todo los del partido de Meloni, Fratelli d’Italia –que son los que habitualmente llevan el himno nacional a todos sus actos entre críticas de los políticos de izquierda– comenzaron a mirarse sin saber muy bien qué hacer.
Finalmente, se pusieron también de pie y se sumaron al coro. Sin embargo, no todos mostraron el mismo fervor italianista. Una senadora veneciana aprovechó el momento para sacar la bandera del león de San Marcos de la Serenissima, que representa a la región del Véneto, una de las regiones más a favor de la autonomía.
Terminado el himno, un senador izquierdista gritó, «¡Viva Italia!», momento que aprovechó el presidente de la cámara para cerrar la sesión: «Con ‘viva Italia’ declaro cerrada la votación».
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