El Papa Francisco durante el rezo del Ángelus en el Vaticano
Santa Sede
El Papa Francisco muestra su dolor por los 164 fallecidos en Kazajistán
Al finalizar el rezo del Ángelus dominical, el Pontífice reclamó desde el Vaticano diálogo, justicia y bien común para recuperar la armonía social
El Papa Francisco mostró su dolor por los al menos 164 fallecidos y sus familias en Kazajistán desde que se desataron las protestas por la subida del precio del gas licuado y contra el régimen autoritario el pasado 2 de enero.
Al finalizar el rezo del Ángelus dominical desde el Palacio Apostólico del Vaticano este domingo 9 de enero, el Santo Padre se dirigió a los fieles congregados en la Plaza de San Pedro, bajo una intensa lluvia, y se solidarizó con las víctimas registradas durante los choques de los últimos días en Kazajistán entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
Crisis en Kazajistán
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«He recibido con dolor la noticia de que se han producido víctimas en las protestas registradas en los últimos días en Kazajistán. Rezo por ellas y por sus familiares, y deseo que se recupere lo antes posible la armonía social por medio de la búsqueda del diálogo, la justicia y el bien común», fueron las palabras del Pontífice.
Además, encomendó «al pueblo kazajo a la protección de la Virgen, Reina de la Paz de Oziornoje», Patrona de Kazajistán.
Las protestas violentas han tenido su principal foco en la ciudad de Almaty, centro económico del país. Los manifestantes lograron ocupar varios edificios oficiales, como la sede del gobierno local, y bloquear el aeropuerto y otras infraestructuras esenciales.
Acosado por la fuerza mostrada en las protestas, el presidente Kassym-Jomart Tokayev trató de bajar la intensidad de las manifestaciones con la dimisión de su gobierno y una bajada generalizada de los precios de los combustibles.
Ante el incremento de la presión de los manifestantes, que exigían un cambio del sistema político heredado de época soviética en un régimen en el que se combina el autoritarismo con la economía de mercado, Tokayev acusó a los manifestantes de ser «terroristas armados» y de estar organizados para dar un golpe de Estado. Para tratar de frenar a los «bandidos criminales», como los definió, ordenó a las fuerzas de seguridad «disparar a matar».
Al mismo tiempo, reclamó la intervención militar de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC), Alianza que congrega a Rusia, Kazajistán, Bielorrusia, Armenia, Kirguistán y Tayikistán.
La crisis en Kazajistán se produce cuando en el Vaticano se podría estar preparando un viaje del Santo Padre al país de Asia Central. Según el vaticanista italiano Andrea Gagliarducci, el Papa podría participar en el Séptimo Congreso de Líderes del Mundo y de las Religiones Tradicionales en Nur-Sultán.
Además, Gagliarducci apunta a que la capital kazaja también podría ser el escenario para el esperado encuentro entre el Papa Francisco y el cabeza del Patriarcado ortodoxo de Moscú, el Patriarca Kiril.
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