Dolor de espalda
¿Cuándo debo preocuparme por el dolor de espalda?
Expertos de la Universidad de Harvard dan las claves para identificar los síntomas
malas posturas, esfuerzos por levantar pesos o enfermedades como la artritis pueden desencadenar en una de las dolencias más habituales entre la población general: el dolor de espalda. Todo el mundo sufre esta molestia al menos una vez en la vida, que en algunos casos es tan intensa que puede provocar una incapacidad temporal para desarrollar nuestro día a día.
Expertos de la Universidad de Harvard señalan en un artículo los principales síntomas de algunas de las complicaciones del dolor de espalda para poder identificar la causa.
Distensión de espalda
El dolor de espalda generalmente comienza el día después de un esfuerzo intenso o una actividad que requiere torsión. Los músculos de la espalda, los glúteos y los muslos suelen estar doloridos y rígidos. La espalda puede tener áreas que duelen al tocarlas o presionarlas.
Fibromialgia
Además del dolor de espalda, suele haber otras zonas de dolor y rigidez en el tronco, el cuello, los hombros, las rodillas y los codos. El dolor puede ser generalizado o punzante, y la rigidez suele ser peor por la mañana. Las personas suelen quejarse de sentirse anormalmente cansadas, especialmente de despertarse cansadas, y tienen áreas específicas que duelen al tocarlas, llamadas puntos sensibles.
Artritis degenerativa de la columna
Junto con el dolor de espalda, se produce rigidez y dificultad para agacharse, que suele desarrollarse a lo largo de muchos años.
Artritis inflamatoria
En la artritis inflamatoria, incluida la espondilitis anquiosante y afecciones relacionadas, hay dolor en la parte baja de la espalda, junto con rigidez matutina en la espalda, las caderas o ambas. El dolor de espalda en estas condiciones tiende a mejorar con el ejercicio. Otras características pueden incluir psoriasis, dolor y enrojecimiento de los ojos o diarrea, según el trastorno específico que causa el dolor de espalda. Este grupo de enfermedades es una causa relativamente rara de dolor de espalda.
Osteoporosis
Esta afección común se caracteriza por huesos adelgazados y debilitados que se fracturan fácilmente. Es más común en mujeres posmenopáusicas. Cuando las vértebras se comprimen debido a una fractura, la postura puede volverse encorvada o encorvada junto con dolor de espalda. La osteoporosis no es dolorosa a menos que se produzca una fractura de hueso.
Disco protuberante
Las personas con una enfermedad discal significativa a veces tienen dolor intenso en la parte baja de la espalda. Si un disco comprime un nervio, el dolor puede extenderse hacia una pierna. El dolor empeora al doblarse o girarse.
Estenosis espinal
El dolor, el entumecimiento y la debilidad afectan la espalda y las piernas. Los síntomas empeoran cuando está de pie o caminando, pero se alivian al sentarse o inclinarse hacia adelante.
infección renal (PIELONEFRITIS)
Las personas con una infección renal suelen desarrollar un dolor repentino e intenso justo debajo de las costillas en la espalda que puede desplazarse hacia el costado hacia la parte inferior del abdomen o, a veces, hasta la ingle. También puede haber fiebre alta, escalofríos, náuseas y vómitos. La orina puede estar turbia, teñida de sangre o inusualmente fuerte o con mal olor. Puede haber síntomas adicionales relacionados con la vejiga, como la necesidad de orinar con más frecuencia de lo normal o dolor o malestar al orinar.
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