La Unión Europea ha prohibido el uso de empastes dentales que lleven mercurio a partir del 1 de enero de 2025
¿Debo reemplazar los empastes dentales de amalgama de plata?
La presencia de mercurio suscita preocupaciones por su toxicidad
El próximo 1 de enero de 2025 entrará en vigor la prohibición en toda la Unión Europea de la utilización de empastes dentales que lleven mercurio, un elemento que suscita preocupaciones por su toxicidad. La exposición continua al vapor de este elemento puede tener riesgos potenciales para la salud a largo plazo: «Aunque estas exposiciones son en cantidades pequeñas, existe cierta preocupación sobre la acumulación gradual en el cuerpo, especialmente en tejidos como el cerebro y los riñones», explica Lorena Trinidad Bueno, odontóloga del Departamento de Innovación y Calidad Clínica de Sanitas Dental quien añade: «Además, algunas personas pueden ser sensibles al mercurio, experimentando reacciones adversas como irritación de las encías, cambios en el gusto y otros síntomas».
De hecho, desde 2018, el uso de la amalgama de plata ha estado restringido para tratamientos en dientes de leche; en menores de 15 años; y en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. En su lugar, se usan empastes de composite que no contienen mercurio y, por ello, se consideran más seguros.
Qué les pasa a los empastes de plata
Los empastes de amalgamas de plata, –una aleación de mercurio, plata, estaño y cobre–, presentan, según expertos de Sanitas, más desafíos específicos para la salud dental, a pesar de su durabilidad.
- En primer lugar, su potencial de decoloración puede ocasionar cambios en el color del diente debido a la oxidación.
- Asimismo, tienen la capacidad de expandirse y contraerse en respuesta a los cambios de temperatura, lo que puede provocar molestias en algunos pacientes.
- Por último, al preparar un diente para recibir una amalgama de plata, se sacrifica parte de la estructura dental, lo que puede provocar que el diente sea más propenso a fracturarse.
Debo cambiar los empaste de plata
Los estudios en personas con amalgama dental no muestran evidencia concluyente de que esta cause efectos nocivos para la salud en la población general. Tanto es así que incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que no está justificada la extracción de los empastes antiguos solo porque contengan una mínima cantidad de mercurio. Tras los estudios se pudo comprobar que la liberación de mercurio es mucho mayor durante su retirada que durante toda la vida útil del empaste en su lugar. Eso sí, al ser antiguos puede que estén deteriorados y deberán ser revisados por un odontólogo.
Composite frente amalgama de plata
En cualquier caso, además del importante aspecto toxicológico, la preferencia de los composites dentales sobre la amalgama de plata se basa en otras diversas ventajas. Los expertos de Sanitas Dental destacan los siguientes beneficios:
Estética mejorada: destaca su capacidad para personalizarse y coincidir con el color natural de los dientes. Esto consigue mejorar la satisfacción del paciente con su apariencia dental.
Conservación del diente: requiere una menor eliminación de la estructura dental sana durante la preparación del empaste, lo que mejora la salud bucodental a largo plazo.
Unión al diente: proporciona una buena adhesión química, lo que contribuye a una mayor estabilidad y reduce el riesgo de filtraciones o desprendimientos con el tiempo.
Menor sensibilidad térmica: los composites tienen menos probabilidad de causar sensibilidad dental ante cambios de temperatura en comparación con la amalgama de plata. Esto mejora la comodidad del paciente.
«Los composites no contienen mercurio, lo que reduce significativamente la liberación de este metal pesado en el medio ambiente. Por eso, el cambio hacia el uso exclusivo de composites en lugar de la amalgama de plata no solo responde a nuestra búsqueda de tratamientos más estéticos y seguros, sino también a nuestro compromiso con la sostenibilidad», concluye Lorena Trinidad Bueno.
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