Imagen de una molécula de hidrógeno
Qué es el hidrógeno blanco que podría provocar una revolución energética
Más sostenible y más económico que el hidrógeno verde, este combustible podría acelerar la descarbonización del transporte
El hidrógeno ha pasado a centrar las miradas de todos aquellos que buscan alternativas a los combustibles fósiles como principales formas de producir energía. Este mismo año conocimos que Alemania se unirá, junto a España, Francia y Portugal, al acuerdo H2Med, el corredor submarino de hidrógeno verde entre Barcelona y Marsella. Un proyecto que pretende transportar desde España dos millones de toneladas de hidrógeno verde al año, lo que representará el 10 % del total consumido por la Unión Europea y poder, de esta forma, depender menos del gas ruso y, a la vez, apostar por energías más limpias.
Pues bien, a este se suma ahora el hidrógeno blanco, también conocido como hidrógeno natural, dorado o geológico, que está presente de forma natural en la corteza terrestre. Se trata de un tipo de hidrógeno diferente al gris –se obtiene a partir de gas natural u otros hidrocarburos– y al verde –se consigue a través de la electrólisis–, utilizados hasta el momento en mayor medida. Sin embargo, el hallazgo reciente de hidrógeno blanco o natural abre la puerta a su utilización, que podría acelerar el proceso de descarbonización.
Fueron dos científicos franceses los que, sin querer, se encontraron hace unas semanas con una gran reserva de hidrógeno. Jacques Pironon y Phillipe de Donato, directores de investigación del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia, estaban buscando combustibles fósiles bajo tierra en el noreste de Francia y evaluando la cantidad de metano en el subsuelo de la cuenca minera de Lorena.
A unos 200 metros de profundidad, la sonda encontró bajas concentraciones de hidrógeno, algo normal. Pero según fueron avanzando la concentración aumentó. «A 1.100 metros de profundidad era del 14 %, a 1.250 metros era del 20 %», dijo Pironon a la CNN. Esto explicaba la presencia de una gran reserva de hidrógeno, que podría contener entre seis y 250 millones de toneladas métricas de este elemento químico.
Se trata, por tanto de uno de los mayores depósitos de hidrógeno blanco jamás descubierto. Eso facilitará su uso en el transporte, y es que a pesar de que el hidrógeno es el elemento más abundante del universo, suele estar combinado con otras moléculas y para separarlo ha de utilizarse mucha energía.
Por ello, el hidrógeno blanco supone un antes y un después al constituir una fuente abundante y sin explotar de energía de combustión limpia.
Proceso de descarbonización
Hasta ahora, el hidrógeno más común era el gris, aunque como hemos dicho al principio, se está impulsando el verde. No obstante, aunque este último se produzca con energías renovables, la producción sigue siendo a pequeña escala y costosa.
La aparición de estas reservas de hidrógeno natural empuja ahora a su utilización para acelerar el proceso de descarbonización, y es que el hallazgo de Francia equivaldría a más de la mitad de la producción anual de hidrógeno gris. Este elemento, que produce agua al ser quemado, es muy atractivo a la hora de generar energía limpia para industrias como la aviación o el transporte marítimo, ya que requieren cantidades de energía que no se pueden satisfacer solo mediante fuentes renovales como la solar y la eólica.
Viendo este descubrimiento casual, convendría invertir más en investigación para poder encontrar yacimientos de este tipo que puedan cambiar del todo la forma de producir energía en el planeta. Se calcula que podría haber decenas de miles de millones de toneladas de hidrógeno blanco en el mundo, pero según destacan los expertos, no estamos buscando en los lugares correctos.
En los últimos años se han hallado depósitos de hidrógeno blanco en Estados Unidos, Rusia, Australia o Malí, así como en diferentes puntos de Europa. Sin embargo, todavía hay grandes incertidumbres sobre el tamaño de estos depósitos naturales y alejan la inmediatez de el uso de este hidrógeno.
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