
Precipitación acumulada hasta la madrugada del viernes
El puente de mayo, en riesgo por una borrasca atlántica: estas serán las zonas más afectadas por la lluvia y el frío
El panorama podría cambiar a partir del miércoles, cuando la incertidumbre sobre el comportamiento de la borrasca será máxima
La evolución del tiempo para la próxima semana, que incluye el esperado puente de mayo, estará marcada por la formación de una borrasca en el Atlántico, cuya trayectoria aún no está definida. Así lo ha advertido la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que señala que este fenómeno tendrá una influencia «decisiva» en las lluvias y en las temperaturas durante la segunda mitad de la semana.
Según detalla la Aemet en su blog, la semana del 28 de abril al 4 de mayo comenzará con estabilidad atmosférica, cielos en su mayoría despejados, pocas precipitaciones y temperaturas que tenderán a ser superiores a lo habitual en buena parte del país.
Sin embargo, el panorama podría cambiar a partir del miércoles, cuando la incertidumbre sobre el comportamiento de la borrasca será máxima. La trayectoria que siga este sistema será clave para determinar qué zonas recibirán lluvias y cómo evolucionarán las temperaturas.
Mientras tanto, en Canarias, el tiempo se mantendrá sin cambios importantes, con temperaturas algo más bajas de lo normal para estas fechas y sin previsión de lluvias.
Por su parte, el portal meteorológico Eltiempo.es confirma que la estabilidad estará garantizada al menos hasta el martes, con temperaturas máximas que oscilarán entre los 20 y los 25 grados en la mayor parte del país. Incluso se superarán los 25 grados en el sur de Galicia, la meseta norte y el valle del Ebro, mientras que en zonas del suroeste, como el valle del Guadalquivir, se podrían alcanzar nuevamente los 30 grados.
A partir de mitad de semana, el pronóstico se complica: si la borrasca se mantiene al oeste de la Península, favorecería un aumento térmico; si, en cambio, se acerca más, podría traer lluvias y un descenso de las temperaturas.
Desde Meteored matizan que, aunque a día de hoy existe bastante incertidumbre en lo que respecta a la trayectoria de esta borrasca, es bastante probable que genere un tiempo muy distinto dependiendo de la zona del país en la que nos encontremos. El ascenso de varias dorsales dará lugar a la formación de grandes zonas de altas presiones entre Azores y el este de Europa, por lo que la baja quedará totalmente aislada de la circulación general.
Tal y como prevén, entre el martes y el miércoles la borrasca se desgajará del chorro polar, situándose frente a las costas de Portugal. Según los modelos meteorológicos, se mantendrá bastante estacionaria en ese sector, sin que su centro se adentre en la Península. Conforme pasen los días se irá rellenando, para finalmente ser reabsorbida por la circulación general a partir del próximo fin de semana.