El Museo Naval inaugura una exposición de Jorge Juan con Felipe VI como primer visitante
La exposición temporal se podrá visitar en el Museo Naval de Madrid, situado en el Cuartel General de la Armada, desde este viernes 24 de noviembre hasta el 31 de marzo de 2024
El Museo Naval de Madrid estrena hoy una exposición temporal dedicada a Jorge Juan, el marino ilustrado del siglo XVIII del que se conmemora este año el 250 aniversario de su fallecimiento, en el verano de 1773. A las puertas del Museo Naval un piquete de honores esperaba la llegada de Felipe VI, al que han recibido el almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada (AJEMA), Antonio Piñeiro Sánchez, y el director del Instituto de Historia y Cultura Naval, el almirante Enrique Torres Piñeiro, entre otros cargos de la Armada.
Felipe VI ha sido el primer visitante de la exposición Jorge Juan, el legado de un marino científico. Blanca Sazatornil Pinedo y José María Moreno Martín, los comisarios de la exposición, han acompañado al monarca durante la visita. A partir de ahora, igual que ha hecho Felipe VI, el resto de los visitantes descubrirán la vida del ilustre marino Jorge Juan, desde su infancia en Alicante hasta su muerte en Madrid a los 60 años.
La exposición se centra en los momentos más relevantes, como su paso por la isla de Malta, la participación de Jorge Juan en la expedición francesa para medir el meridiano, el periodo que pasó de espía en Inglaterra, el papel del marino en la construcción de los arsenales españoles y su modelo de construcción naval, o la creación del Real Observatorio en Cádiz.
Desde el Museo han querido centrar el discurso en el espíritu renovador e internacional del marino «sin el que no se entiende el siglo XVIII a nivel científico», explica Blanca Sazatornil. Aunque su legado todavía perdura porque «hay aspectos de la vida de Jorge Juan que continúan presentes en la vida e ideario de la Armada actual, desde los arsenales hasta la escuela de guardiamarina», afirmó el Capitán de Navío Juan Escrigas Rodríguez, director del Museo Naval, durante el acto.
Una exposición inmersiva
Utilizando un discurso sobrio «nos acercamos a Jorge Juan queriendo mostrar la globalidad de este personaje», explica José María, a través de cinco unidades temáticas y 113 obras. En su mayoría «son contemporáneas a la época en la que vivió Jorge Juan, libros que él ha leído, piezas e instrumentos que él ha tocado, cuadros que se pintaron en aquel momento», detalla el conservador. Además, provienen de diversos países y sedes.
Hay 47 piezas procedentes de otras instituciones, entre las que se encuentran la Biblioteca Nacional de España, el Archivo General de Simancas, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando o el Museo Nacional del Prado. El cuadro que refleja el embarque de tropas en Cartagena, es una cesión de Patrimonio Nacional, el retrato de Felipe V lo ha cedido el Museo del Prado e instrumentos como el «telescopio nos lo ha prestado el Observatorio de la Armada de Cádiz», explica Blanca Sazatornil.
Dentro de esa selección hay piezas que «son la primera vez que se exponen al público», explica, como el cuadro que ha venido del palacio de Malta y los dos retratos de los científicos franceses. Como curiosidad, la última obra antes de salir de la exposición es un busto de Jorge Juan cedido por el Instituto de Bellas Artes de San Fernando y que se hizo utilizando la máscara mortuoria del marino como modelo. Si las piezas son el centro del discurso, hay también una pantalla con un vídeo que sirve para explicar aspectos más científicos de la medición del meridiano, y una audioguía en la que el secretario de Jorge Juan guía al visitante por todo el recorrido.