El rover Mars Perseverance de la NASA, en el cráter Jezero
Las rocas de Marte llegarán a la Tierra, ¿podrá la NASA investigar las muestras?
En 2021 aterrizó en Marte el rover Perseverance, el primer robot de la NASA diseñado para recolectar muestras del planeta rojo
Si hay algo de novedoso en las naves que viajan a la Luna –aparte de estar en el espacio– es que recolectan muestras de asteroides o trozos de la misma y las desplazan a la Tierra para que los investigadores puedan estudiarlas y saber cómo se comporta nuestro satélite. Gracias a nuevos avances tecnológicos, los científicos que estudian Marte podrían estar cerca de realizar algo parecido, pero sólo si la NASA y la ESA llevan a cabo una misión compleja y audaz.
En 2021 aterrizó en Marte el rover Perseverance, el primer robot de la NASA diseñado para recolectar muestras del planeta rojo. Seis años después de su llegada, la agencia estadounidense mandará naves espaciales para recoger lo guardado y traerlo a la Tierra. No obstante, el plan multimillonario podría no llevarse a cabo por problemas tecnológicos y financieros.
Este informe, recogido en la revista científica Nature, explica que la NASA quiere asignar casi mil millones de dólares a la devolución de muestras de Marte en el próximo año fiscal, una suma enorme que podría obligar a la agencia a recurrir a otras partes de su presupuesto científico. Esto afectaría a otros proyectos, lo que podría retrasar una misión de heliofísica planificada.
Y hay mucho en juego para el retorno de la muestra de Marte, puesto que Perseverance ha reunido un conjunto de rocas científicamente impresionantes. Entre los meses de diciembre y enero, el rover depositó diez tubos del tamaño de un cigarro llenos de roca, suelo y aire de la atmósfera marciana en un área plana de la superficie del planeta para que una futura misión los recoja.
Diez ttubos del tamaño de un cigarro
En los próximos meses, asegura la revista, la NASA y la ESA tendrán que tomar decisiones cruciales sobre cómo será finalmente la misión y cuánto creen que pueden gastar en ella. En este sentido, la directora de ciencia de la agencia estadounidense aseguró el pasado mes de marzo que están haciendo «una inmersión muy, muy profunda en eso».
Una misión complicada
No antes de 2027 la ESA planea lanzar una nave espacial a Marte. El próximo año, la NASA enviaría otra nave para aterrizar en la superficie del planeta o cerca del cráter Jezero, donde Perseverance está explorando, y «colocaría las muestras de roca en un contenedor», asegura Alexandra Witze, especialista en temas científicos.
Una vez realizada la acción, la NASA lanzaría un cohete con un contenedor y viajaría en órbita para encontrarse con la nave espacial de la ESA, que lo capturaría y lo llevaría a la Tierra, aterrizando en el desierto de Utah no antes de 2033.
Son muchos los pasos que tendrían que ser exitosos para que todo funcione. «La misión sigue siendo compleja», dijo Jeff Gramling, director de retorno de muestras de Marte en la sede de la NASA en Washington DC, ya que entre los nuevos inventos para el retorno de muestras de Marte se necesitaría un cohete que se lanzaría desde la superficie marciana y un helicóptero en miniatura con ruedas y pinzas.
En el caso de que Perseverance no pueda entregar las muestras almacenadas, los helicópteros se liberarían del módulo de aterrizaje y tomarían las muestras depositadas anteriormente en el suelo. «Se inspirarán en el helicóptero Ingenuity, que acompañó a Perseverance al cráter Jezero y hasta ahora ha realizado 48 vuelos», asegura Alexandra Witze.
Hasta aquí si el plan sale bien sería revelador. El problema es que, según ha explicado la NASA, es probable que uno de los dos helicópteros planeados tenga que retirarse del proyecto por falta de presupuesto. En los próximos meses, las dos agencias finalizarán el diseño de todos los componentes de retorno de muestras de Marte y determinarán la primera estimación integral del coste para la misión.
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