Los jugadores del Real Madrid celebran un gol en el Metropolitano
Los datos que demuestran que el Real Madrid no es un equipo defensivo
Simeone consideró al Real Madrid un equipo que basa su juego en el contrataque; sin embargo, las estadísticas muestran otra cosa
al finalizar el pasado derbi madrileño, Simeone dijo que «el Madrid defiende muy bien, corre poco, te cierra espacios, ataca a la contra. Tiene una contundencia terrible y eso le da una diferencia con el resto importante». Se quedó la idea de que el equipo blanco era un equipo defensivo que solo tiene en la contra su argumento futbolístico. Ancelotti recogió el guante y se tomó estas palabras de Simeone como un halago: «Si Simeone dice que hemos defendido bien en bloque bajo le digo que gracias, es un cumplido». No obstante, los datos muestran que el Real Madrid es un equipo con mentalidad ofensiva, algo que se demuestra con el hecho de que en todos los partidos que ha disputada esta temporada haya anotado.
El Real Madrid es además un equipo que no renuncia a llevar la iniciativa, habiendo ganado la posesión a su rival en seis de los nueve partidos que ha disputado este curso. El equipo blanco sabe adaptarse a las condiciones del partido y se ha convertido en un especialista tanto en abrir defensas cerradas como en aguantar los buenos momentos de sus rivales para aprovechar los espacios y encontrar el gol al contragolpe. Sin embargo, aunque pueda parecer por cómo terminó la jugada que los goles del derbi vinieron de contrataques, la realidad es que ambas nacieron con un saque de puerta de Courtois.
Jugadas elaboradas para ganar el derbi
Con dos jugadas elaboradas desde atrás consiguió el Real Madrid ganar en el Metropolitano. Es decir, lo contrario a lo que analizó Simeone. En la primera de ellas fue Tchouaméni el que se encargó de iniciar la jugada, cediendo la pelota a Valverde para que el uruguayo encontrase a Mendy en banda izquierda, el carrilero pasó la pelota a Tchouaméni que se encargó de hacer una vaselina en forma de pase a Rodrygo para que este definiera al palo corto. Nueve pases en 28 segundos para anotar el primer gol.
El segundo gol fue una secuencia más trabajada, con 21 pases y un minuto en el que la pelota va de banda a banda en el campo del Madrid hasta que Modric envía una pelota para que corra Vinicius que al definir se estrella con el palo hasta que llega Valverde para recoger el rebote y mandar el esférico al fondo de la red.
Fede Valverde celebra su gol anotado ante el Atlético
Lo cierto es que el Real Madrid domina tanto el contragolpe como el hecho de comenzar jugadas y encontrar los espacios necesarios para genera ocasiones. El equipo blanco es ahora mismo el segundo máximo goleador de la competición con 17 tantos en seis partidos, solo superado en un gol por el Barcelona, quien cuenta con un goleador estelar como Lewandowski, que lleva ocho goles. En el Madrid no han podido contar los dos últimos partidos con su mejor anotador, Karim Benzema, que en principio volverá en el siguiente partido ante Osasuna.
Si salimos de nuestras fronteras y contamos los compromisos europeos que ha tenido el Madrid, los datos ofensivos siguen siendo magníficos, con siete goles en tres partidos –teniendo en cuenta también el de la Supercopa de Europa– y ninguno encajado. Esta solidez defensiva solo la está consiguiendo en Europa, pues en el campeonato doméstico el Madrid ha encajado un gol en cada uno de sus partidos, siendo la única asignatura pendiente para la vuelta del parón. El club blanco está cerca de firmar el mejor arranque de su historia y para ello una mejora en la faceta defensiva será fundamental.
El Madrid no suele ser defensivo
En cierto modo las palabras que dijo Simeone en la rueda de prensa posterior al partido son ciertas, pues el Madrid utilizó un bloque bajo para contener los ataques rojiblancos y no permitir que la delantera rojiblanca tuviese espacios: «Quitamos el peligro de ruptura de los Griezmann o Joao Félix, el bloque bajo nos permitió controlarlos bien», comentó Ancelotti en rueda de prensa. Los blancos optaron por un planteamiento más defensivo de lo habitual para aprovechar los espacios que suele dejar en defensa el Atleti.
Sin embargo, Simeone no contaba toda la verdad. Ese derbi fue el primer partido de la temporada en el que el Madrid tuvo la línea tan baja. En el resto de partidos del curso los blancos han defendido más adelantados y han buscado ir a por el partido mediante la posesión y la paciencia. Lo que queda demostrado con este derbi es que los de Ancelotti dominan las dos artes del fútbol, lo que les convierte en un equipo muy completo y peligroso.
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