Isco baila bajo la lluvia de Sevilla y deja tocado al Real Madrid

La ley del ex. Esa no escrita que se cumple una y otra vez en el fútbol. Isco Alarcón se vistió de mago en el Benito Villamarín para pedir sitio en la selección y ya de paso dinamitar la Liga. Ni la tormenta que se desató en Sevilla ni el hecho de empezar perdiendo hicieron dudar al centrocampista malagueño, que fue vital para que el Real Betis remontara y tumbara al Real Madrid por 2-1.

Una batalla bajo la lluvia en la que los de Carlo Ancelotti estuvieron irreconocibles, con el equipo partido, espesos en ataque y blandos en numerosas jugadas defensivas. Empezó bien, pero con el paso de los minutos se fueron diluyendo sin que nadie se echara el equipo a la espalda y acabaron desesperados colgando balones a la olla buscando un milagro que esta vez no llegó. Dudas antes del derbi europeo.

Si alguien esperaba un partido cerrado y donde los equipos esperaran tranquilos a que les llegase su oportunidad pronto descubrieron que no iba a ser así. Real Betis y Real Madrid quisieron la victoria desde que echó a rodar el balón y el conjunto blanco –de naranja esta tarde– entró mejor al césped del Benito Villamarín. Se hizo con el control del esférico y encerró al conjunto verdiblanco en su campo.

Fue en la primera ocasión que tuvo cuando se adelantó el Real Madrid, aunque antes ya había dado muestras de que habían comenzado inspirados. Un balón filtrado por Mbappé sirvió para que Mendy se vistiese de centrocampista dentro del área y pusiese el pase de la muerte a un Brahim que únicamente tuvo que empujarla para poner el 0-1 antes del minuto 10. Sorprendió el lateral izquierdo francés con su aparición ofensiva y el Madrid se encontraba cómodo en Sevilla.

El Betis fue ganando terreno

El gol dio fuerzas a los de Ancelotti para ir a por el segundo, pero también despertó al Betis, que se fue metiendo poco a poco en el partido. Primero lo intentó Ricardo Rodríguez con un disparo que se marchó alto, pero rápidamente respondió Vinicius con un centrochut que estuvo cerca de colarse en la portería de Adrián. Aun así, los hispalenses fueron ganando metros y Bartra dio un nuevo aviso al recoger un rechace que se marchó fuera por poco.

Iba creciendo el Betis y acercándose a la meta de Courtois. Quien avisa no es traidor y en un córner sacado por Isco Johnny Cardoso se anticipó a toda la defensa del Real Madrid para poner el empate con un testarazo a bocajarro. Se durmió la zaga blanca y lo pagó caro porque el Betis se creció mientras una chupa de agua caía en el Villamarín para volver más loco el partido. De hecho, de no ser por un nuevo milagro de Courtois en el descuento tras un córner el Madrid se habría ido perdiendo al descanso.

La segunda mitad, también con lluvia, continuó con el guion de la primera, el Betis dominando y jugando al ritmo de Isco mientras el Madrid trataba de cazar alguna contra con Mbappé y Vinicius, algo de lo que estuvieron cerca de no ser por una gran entrada de Bartra abajo. Animó esto más aún a los verdiblancos y sobre todo a Isco, que dibujó un pase perfecto para dejar solo al joven Jesús Rodríguez, arrollado por Rüdiger en el área.

Tanto se estaba gustando el malagueño sobre el césped del Villamarín que asumió la responsabilidad desde los 11 metros y acertó con un disparo fuerte a la derecha de Courtois, que le adivinó el lado pero su estirada no fue suficiente. Disfrutaba el Betis mientras el Real Madrid naufragaba y Ancelotti miraba al banquillo buscando soluciones.

No era la tarde del Real Madrid

Lo intentó el técnico italiano y hasta se atrevió a sentar a Mbappé para dar entrada a Endrick, pero es que no era la tarde. Ni el ataque de entrenador salió bien y Adrián San Miguel fue un espectador más por mucho que los blancos intentaran con empuje rescatar al menos un punto. Patas arriba la Liga y golpe duro al Real Madrid.