Aboubakar marca el gol de la victoria ante Brasil

Aboubakar marca el gol de la victoria ante BrasilAFP

Camerún 1-0 Brasil

Ni Brasil gana todo en este Mundial

La Canarinha cae en el último partido contra Camerún y se queda a un gol de ser segunda de grupo

El Mundial de Qatar parece el Mundial de las sorpresas. Ni Brasil ha sido capaz de cerrar la fase de grupos con pleno de victorias. Se dejó llevar en su partido contra Camerún y los africanos acabaron sorprendiendo en el tramo final. Tanto, que la Canarinha estuvo a un gol de quedar segunda de grupo.
De un día a otro, a Brasil se le limpió el camino hacia semifinales y casi lo desgracia en último momento. De enfrentarse a Uruguay, presumiblemente, en octavos y a España en cuartos, ha pasado a verse las caras con Corea del Sur y después con Croacia o Japón. Las sorpresas en un Mundial están a la orden del día y por eso es mejor evitar hacer cábalas. Basta hacerlas para saber que el castillo de naipes se va a venir abajo.
Todo esto siempre y cuando Brasil no perdiera con Camerún por dos goles y Suiza ganara mejorando el golaveraje, que entonces los helvéticos serían campeones de grupo. Pero Brasil no estaba por la labor de que eso ocurriera, por mucho que Tite saltara al césped con todo suplentes. Suplentes, pero un equipo que estaría obligado a entrar, por lo menos, entre los ocho mejores del mundo: Ederson, Militao, Fred, Alex Telles, Fabinho, Rodrygo, Gabriel Jesus… Cualquiera los querría en su equipo.
Poco tardó Brasil en llevar peligro. Un balón alto y cruzado al área que cazó Martinelli para probar a Epassy. Gran manopla del cancerbero camerunés, que envió a córner y evitó el primero de la noche. Solo habían pasado 15 minutos y parecía que iba a ser una noche más de festival brasileiro.
Lo parecía, pero de ahí a lo que pasara había un mundo. Se torció el partido para Brasil, que pensaba más en los octavos que en lo que había sobre el césped. Las noticias del otro partido, además, acompañaban a Camerún, que cerca estuvo de adelantarse al filo del descanso. En ese momento un tanto los clasificaba pero un paradón de Ederson a un cabezazo de Mbeumo evitó el tanto.
La segunda parte siguió la misma tónica. Los goles de Suiza destrozaban las ganas de soñar de Camerún y los brasileños no quisieron hacer sangre. Como si hubiese un pacto no escrito. Los africanos no metían la pierna y evitaban el riesgo de lesionar a nadie y la Canarinha dejaba simplemente pasar los minutos, como quien hace un rondo en el patio del colegio.
Confiarse no suele ser acertado en el fútbol y el destino suele hacer sufrir a quien lo hace. Brasil se confió y casi acaba por el otro lado del cuadro. Suiza se imponía a Serbia sin sufrir y Camerún sorprendió pasado el 90. Centro desde la banda derecha africana y en el área esperaba Aboubakar para batir con un testarazo a Ederson. 1-0, sorpresa y Brasil a ver de reojo lo que hacía Suiza.
Un gol de los helvéticos les hacía campeones de grupo y mandaba a Brasil por el lado que ahora es difícil y parecía el fácil. Lo mismo pasaba si era Camerún la que veía puerta, pero al final ni una cosa ni la otra y la Canarinha cumple con lo esperado. Primera de grupo, con más suerte de la necesaria, y se verá con Corea del Sur en octavos de final. Tendrá que volver a la primera versión que vimos de Brasil si quiere estar en cuartos.
Comentarios
tracking