El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos
El Banco de España ve innecesaria la promesa estrella de Sánchez para aliviar a los hipotecados
Hernández de Cos propone que el dinero del impuesto a la banca se quede en el balance «para que puedan crecer ante circunstancias extraordinarias»
«No vemos la necesidad». Con estas palabras despachaba el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, una de las promesas estrella de Pedro Sánchez para la nueva legislatura: elevar de 30.000 a 38.000 euros el umbral de renta para acceder a las ayudas hipotecarias contempladas bajo el paraguas del Código de Buenas Prácticas.
El Gobierno aprobó, en noviembre de 2022, un paquete de medidas para tratar de paliar el impacto de las continuas subidas de los tipos de interés. Vigente hasta 2024, facilita la reestructuración de la deuda, quitas de capital pendientes o incluso la dación en pago de la vivienda para familias vulnerables.
«El Banco de España valoró de una manera positiva el acuerdo de otoño del año pasado», ha asegurado Hernández de Cos. «ENo vemos necesidad de hacer una modificación del Código, lo que no significa que no hagamos un seguimiento de la situación de las familias», ha explicado el gobernador, tras ser preguntado al respecto en el almuerzo anual organizado por la Asociación de Mercados Financieros (AMF).
El gobernador ha considerado «limitado» el uso de las medidas, que según sus propias estimaciones iba a beneficiar a cerca de 549.000 hogares. «Lo que hemos observado, por los datos que han proporcionado las entidades y que hemos publicado, es que el uso está siendo todavía limitado, porque la economía ha ido razonablemente bien».
Algo que el Gobernador ha vinculado con una marcha de la economía mejor de la esperada. «Creo que todos nos hemos sorprendido de la resiliencia, en particular del mercado de trabajo», ha considerado. De Cos, que también forma parte del Consejo de Gobernadores del Banco Central Europeo (BCE) también ha descartado una bajada de los tipos de interés a corto plazo, precisamente porque pese a que espera un «enfriamiento» de la economía en los próximos meses, la recuperación podría comenzar ya en 2024.
Es prematuro hablar de bajadas de los tipos de interés
«La valoración que hacemos es que ese nivel de los tipos de interés mantenido durante un tiempo suficientemente largo podría ser suficiente para alcanzar nuestro objetivo de inflación del 2 % a medio plazo. Es prematuro hablar de bajadas de tipos de interés», ha afirmado.
Impuesto a la banca
Preguntado por El Debate sobre si considera acertada otra de las promesas del nuevo Ejecutivo, en este caso hacer indefinido el impuesto especial que grava los beneficios de las entidades bancarias al calificarlos de «extraordinarios», De Cos ha considerado que sería «más saludable» que el dinero recaudado «se quedase en el balance de los bancos para poder hacerles crecer ante circunstancias extraordinarias y aumentar su capacidad de resiliencia».
Preguntado sobre cuáles deberían ser las prioridades del nuevo Ejecutivo, De Cos se ha remitido al informe anual del Banco de España, situando como principal reclamación la reducción de los desequilibrios estructurales tras la política fiscal expansiva realizada durante los años de pandemia, que han generado un elevado nivel de endeudamiento.
Euro digital
El gobernador ha abogado en su intervención durante el foro de AMF por continuar el desarrollo del euro digital. «Cualquier esfuerzo que hagamos en los próximos años estará justificado», ha afirmado, si bien ha considerado que su éxito «dependerá de que se cumpla con las expectativas de los usuarios».
El Banco Central Europeo anunció hace escasas semanas que este mismo mes el euro digital ha pasado a la fase de preparación, en la que se deberán completar las normas de funcionamiento. También se procederá a elegir a los proveedores que podrían desarrollar la plataforma y la infraestructura.
«Cualquier decisión sobre su aplicación estará supeditada a la existencia de un marco normativo adecuado», ha asegurado De Cos, que ha asegurado que el euro digital, de llegar finalmente a implantarse, tendrá «un nivel de privacidad muy alto», dado que desde el regulador «no tendremos acceso al nivel de detalle del saldo o las transacciones del cliente».
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