El presidente de Prisa y representante de Amber Capital en Indra, Joseph Oughourlian
Inversores afines a Sánchez pagarían 400 millones a Oughourlian por su parte de Prisa, pero no quiere vender
No puede abandonar al grupo de inversores que le apoyan y con los que espera seguir invirtiendo
Slim, íntimo de Felipe González, se acerca a Oughourlian, mientras 'TelePedro' se enfría
El Gobierno está desesperado con la posibilidad de perder el control del Grupo Prisa, dueño de El País y la Cadena SER. Ahora sus afines están filtrando que estarían dispuestos a comprar el paquete de acciones del presidente de la compañía y principal accionista, Joseph Oughourlian (tiene el 29,7 %), por 400 millones de euros, según ha podido saber El Debate de fuentes conocedoras de primera línea.
A priori sería un buen trato. El francés de origen armenio ha dicho en algunas ocasiones que ha invertido 300 millones de euros en el grupo, aunque algunas fuentes aseguran que han sido más. Los 400 millones le servirían para recuperar la inversión del grupo al que representa, Amber Capital, principal accionista de Prisa.
Pero no parece que vaya a vender. Con la reciente ampliación de capital, los acreedores ya han suscrito alrededor de 1.000 millones de euros en bonos convertibles en acciones. Lo han hecho fiándose de su palabra, y no va a abandonarlos. Son los inversores con los que invierte habitualmente, y espera seguir haciéndolo. Sería quebrar su confianza, que es clave en estos negocios.
Por eso, la única manera que tiene el Gobierno de mantener el control es lanzar una OPA (oferta pública de adquisición de acciones) por el 100 % de la compañía. Le saldría por entre 800 y 900 millones de euros, una cantidad muy elevada y que es difícil creer que consigan. Hay que tener en cuenta que no pudieron garantizar a Oughourlian los 20 millones que hacían falta para que Prisa lanzara la nueva televisión del Gobierno: Tele Pedro.
Con este escenario, el panorama de cara a la junta de accionistas de Prisa de junio es el que es. A día de hoy Oughourlian tiene asegurada la mayoría tras la entrada de nuevos inversores institucionales extranjeros de la última ampliación de capital, sus apoyos habituales, los propietarios de los bonos convertibles en acciones y la dilución de capital de los accionistas afines al Gobierno de Sánchez. Si todo sigue así, como contábamos anteayer en este artículo, la idea del presidente de Prisa es reconducir la ideología de sus medios a un centro-izquierda alejado del sanchismo.