Rechazo a la reforma de las oposiciones: «Peligra la igualdad de oportunidades y la imparcialidad»

El nuevo modelo que propone el Gobierno, en concreto, el ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública es reformar las oposiciones para los grupos A1 y A2 de la Administración. Esto se traduce en un cambio en el modelo de acceso a la función pública. Se convocarán más plazas, pero los aspirantes tendrán que pasar dos exámenes, uno para superar el máster de dos años -la formación específica en escuelas e institutos públicos creados para este fin- con el que obtendrán una titulación oficial; y el segundo, el examen para obtener la plaza de la oposición.

La mayor parte de las asociaciones, organizaciones y sindicatos de funcionarios están en contra de esta reforma que plantea el Ejecutivo.

Desde FEDECA (Federación Española de Asociaciones de los Cuerpos Superiores de la Administración Civil del Estado), que integra a más de 40 asociaciones, manifiestan su rechazo a la reforma que genera «una gran incertidumbre para los candidatos que podrían quedar eliminados por una mala evaluación ordinaria». Este nuevo modelo lo que podría provocar es un modelo que «deseche talento» y que no garantice como ahora la «igualdad de oportunidades». Así manifiestan que esto podría generar «una mayor arbitrariedad y opacidad» en el proceso de selección.

Sin embargo, una postura minoritaria es la de Gestha-Técnicos del Ministerio de Hacienda- que sí que respaldan esta propuesta del Gobierno de cambio de modelo de acceso a la Administración. Por su parte, consideran que hay que «cambiar el modelo que se adapte a las necesidades actuales en una sociedad que por la digitalización ha cambiado» y huir de esas «gymkanas memorísticas» que ocurrían a principios del siglo XX. Aunque piden preservar «el mérito, la igualdad de oportunidades y la capacidad».

Hablamos con Rosario Gelabert, vicepresidenta segunda de FEDECA; y con José María Mollinedo, secretario de Gestha.