Pedro Sánchez interviene en el acto 'En defensa de una universidad de calidad, clave para el ascensor social'
Expertos, contra Sánchez tras declarar la guerra a la universidad privada: «Es como exigir a un bar 500 clientes diarios»
El presidente del Gobierno anunció ayer a bombo y platillo la aprobación del endurecimiento de los criterios para la creación de universidades privadas, medida que varios expertos en la temática han criticado en conversación con El Debate
Después de que la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, cargase duramente contra la universidad privada durante un mitin en Málaga este pasado domingo, su líder, Pedro Sánchez, hizo lo propio ayer durante el acto 'En defensa de una universidad de calidad, clave para el ascensor social', donde anunció a bombo y platillo la aprobación este martes en Consejo de Ministros del endurecimiento de los criterios para la creación de universidades privadas.
«Vamos a perseguir las prácticas que atenten contra el prestigio de nuestras universidades, tanto públicas como privadas, para que cumplan con nuestros estándares de calidad y aseguren la excelencia de los profesionales que nos cuidan y nos defienden», sentenció el presidente a colación de este nuevo mandato. En esta misma línea, Sánchez tachó a ciertas universidades privadas de «chiringuitos educativos», a la vez criticó que algunas entidades de educación superior «no buscan la excelencia ni la investigación, sino simplemente hacer caja emitiendo títulos sin exigencias reales».
Este informe, añadió Sánchez, será vinculante en el proceso de creación de nuevas universidades, «garantizando así el control riguroso e independiente». Asimismo, se endurecerán los criterios de apertura de nuevas universidades y se exigirá una masa crítica mínima de 4.500 estudiantes en los primeros cinco años de ejercicio.
«Vamos a reformar las garantías de solidez económica. Vamos a pedir que se asuma el compromiso de disponer al menos de un 10 % de plazas de alojamiento universitario para facilitar el acceso a la vivienda y se va a exigir experiencia en la gestión universitaria a sus promotores. Y tendrán requisitos, por tanto, más estrictos», ha puntualizado el presidente del Gobierno.
Fernando Lostao, doctor en Derecho especializado en educación universitaria y experto en la temática, ha argumentado en conversación con El Debate que esta nueva medida del Ejecutivo de Sánchez «es una forma de proteger a las universidades públicas», ya que «están perdiendo cuotas de alumnos». En concreto, las universidades privadas ganan cada año un 1 % más de alumnos, en detrimento de la pública: «La única intención del Gobierno es intentar cerrar universidades privadas», denuncia.
«No entiendo por qué tachan de chiringuitos a algunas universidades privadas cuando hay agencias de calidad que las verifican», denuncia Lostao en referencia a ANECA, órgano dependiente del Ministerio de Universidades, regido en la actualidad por la socialista Diana Morant, encargado de que todos los títulos pasen una verificación inicial, un examen de calidad antes de ponerse en marcha la universidad y otro control a los cinco años de haber recibido la acreditación.
Un ataque más a Ayuso
A juicio de este experto, el debate sobre la educación superior debería traspasarse también a la universidad pública, ya que «no se están examinando a sí mismas y no van a resolver sus problemas poniendo más trabas y requisitos a la privada», sostiene.
Por otro lado, Lostao sugiere que parte de los requisitos son «completamente disparatados», ya que, por ejemplo, exigir una alternativa habitacional ligada a la entidad privada «es mezclar dos cosas que nada tienen que ver entre sí». Además, tacha de «descabellado» el hecho de que se requiera un número mínimo de alumnos en la universidad. «Es como si para abrir un bar te exigen un mínimo de 500 clientes por día y 50 mesas», expresa.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la Universidad Complutense
Asimismo, este doctor en Derecho asegura a este periódico que «es una forma más de cargar contra Ayuso, porque es la que está plantando más cara a las universidades públicas de la Comunidad Autónoma y las está exigiendo un mínimo».
Por su parte, Jesús Pueyo, secretario general de FSIE, organización sindical de la enseñanza privada y concertada, ha expresado en declaraciones a El Debate que «cargar ahora contra las universidades privadas es un ataque a la libertad de enseñanza y a la pluralidad educativa». Asimismo, ha aseverado que «FSIE está a favor de la libertad y no de la imposición de un único modelo de educación, como algunos pretenden imponer».
