Foto de archivo de un agente de la Policía Nacional de Valladolid
Salud mental
Los suicidios entre los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado baten récord en 2021
Vox asegura que, aunque a finales de 2020 se modificó el marco normativo de prevención de suicidios y protección de la salud mental de estos servidores públicos, no se han adoptado nuevas medidas
El pasado 2021, 17 policías nacionales y 17 guardias civiles se quitaron la vida, un 54 % más que en 2020. Si bien a finales de 2020 el Congreso adoptó medidas para reducir estas tasas de suicidio, desde entonces no se ha adoptado ninguna medida tendente a su prevención. Esto es lo que asegura el partido de Abascal y, por ello, a finales de julio, su grupo parlamentario presentó una proposición no de ley para establecer un nuevo marco normativo.
Si se extrapolan las cifras de suicidio de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) en base diaria, el resultado es escalofriante. Un agente se suicidó cada 11 el año pasado. Así, se superó el máximo anterior, cuando en 2017 se suicidaron 28 agentes. Otro dato relevante es que los más propensos a quitarse la vida son los más jóvenes, pues más de la mitad no llegaban ni a los 41 años.
Histórico de suicidios en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado
Una partida en los presupuestos
A finales de septiembre de 2020, la Cámara Baja aprobó una proposición no de ley sobre la adopción de medidas para reducir las tasas de suicidio policial. El texto legal incorporó las enmiendas presentadas por el grupo conservador - que solicitó basar el marco normativo en tres niveles: prevención, intervención y postvención -. Sin embargo, Vox denuncia que, dos años después, «no consta que se hayan adoptado nuevas medidas tendentes a prevenir los suicidios de nuestros agentes».
Asimismo, la formación conservadora subraya que «no existe ninguna partida presupuestaria específica que financie el gasto de prevención de suicidios de las FCSE en los Presupuestos Generales del Estado».
Por todo lo anterior, Vox aboga por «establecer un marco normativo que prevenga el suicidio entre los agentes de las FCSE» establecido sobre los mismos tres niveles sobre los que versó su enmienda a la proposición no de ley aprobada por el Congreso en 2020: prevención, intervención y postvención. Esta última, para el caso en que hubieran fallado los dos niveles anteriores, ayudando psicológica y terapéuticamente a los familiares y compañeros sobrevivientes al agente que se hubiera quitado la vida.
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