Banda de «no pasar» en el lugar del atentado de Algeciras
Las señales que no descartaban un atentado yihadista en España como el de Algeciras
La acción terrorista no ha cogido por sorpresa a los expertos en la lucha contra el yihadismo
No cogió por sorpresa el atentado yihadista de Algeciras. «No era descartable la actuación de un 'lobo solitario' en España», han afirmado fuentes de la lucha contra el yihadismo. No en vano, nuestro país permanece en el nivel 4 alerta antiterrorista (sobre un máximo de 5) desde hace más de siete años.
El año pasado ya se produjo un repunte importante tanto en las operaciones policiales contra el yihadismo (22,72 %) como en las detenciones de presuntos yihadistas (18 %). Este aumento se debió a un mayor seguimiento por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de cualquier movimiento, físico o a través de las redes sociales, que pueda ser sospechoso de yihadista. Pero siempre puede quedar un 'lobo solitario', como parece ser el caso de este miércoles en Algeciras.
De hecho, el presunto yihadista que asesinó el miércoles al sacristán de la parroquia de La Palma de Algeciras e hirió al párroco de San Isidro, cumple más o menos con el perfil elaborado por el Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo con las detenciones registradas en 2021.
Según la OIET, y basándose en los ataques de 'lobos solitarios' en Francia, donde es más frecuente su acción, «este tipo de incidentes terroristas son realizados por individuos sin experiencia y no insertos en estructuras terroristas superiores. Sus víctimas suelen ser población civil o policías, con una sobrerrepresentación de sujetos con enfermedades mentales que han podido consumir o no propaganda». En el caso de Yassin Kanjaa, tenía 25 años, se encontraba en situación irregular, estaba pendiente de expulsión y no tenía antecedentes penales.
De hecho, el último atentado yihadista en España, hasta el del miércoles, se produjo el 17 de septiembre de 2021 en Torre Pacheco (Murcia) cuando un joven arrolló con su vehículo a las personas que se encontraban en el bar Honey’s y provocó la muerte de un hombre además de la del propio autor del atropello, que dejó un texto reivindicando su acción.
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