La presidenta de Congreso, Francina Armengol
Manto de silencio de Armengol sobre el escándalo de su pareja mientras pone el Congreso al servicio de Sánchez
La presidenta del Congreso de los Diputados, la socialista Francina Armengol, avaló el pasado martes que el letrado mayor de la Cámara Baja, Fernando Galindo, diese plantón a la Comisión de Venecia del Consejo Europeo; que se ha trasladado esta semana a España para estudiar la ley de amnistía.
La Mesa de la Cámara, liderada por Armengol y con mayoría del PSOE y Sumar, impidió que Galindo se viera con la Comisión a pesar de que el organismo con sede en Estrasburgo lo había solicitado. «Armengol debe rendir cuentas cuanto antes y explicar por qué Fernando Galindo no puede reunirse con la Comisión de Venecia», expresó el portavoz parlamentario de los 'populares', Miguel Tellado, que también criticó que Armengol y el letrado mayor del Congreso –«fieles colaboradores» de Sánchez– pongan «una alfombra roja» al presidente del Gobierno para que pueda «ejecutar» su agenda.
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Igualmente, la presidenta de la Cámara Baja hizo caso omiso al escrito de reconsideración del Grupo Parlamentario Popular para que «se impida cualquier actuación o trámite parlamentario alguno tendente a reactivar o continuar el procedimiento legislativo» de la Ley de Amnistía, ya que fue «rechazada por mayoría absoluta en la votación final».
Miguel Tellado, Cuca Gamarra, y Alberto Núñez Feijóo en el Congreso de los Diputados
Tan solo un día después –el miércoles 7 de febrero, y durante la sesión de control al Gobierno– la también expresidenta de Baleares apagó el micrófono durante la intervención del presidente de los 'populares', Alberto Núñez Feijóo, sin haberle avisado previamente. Lo mismo le ocurrió al jefe de la oposición el pasado 30 de enero durante el debate de la amnistía, cuando la tercera máxima autoridad del Estado le espetó «señor Feijóo, no me parece adecuado sus palabras, vaya terminando»; para segundos después cortar su intervención.
Las lenguas cooficiales y el aplauso a la Princesa
En su primer discurso como presidenta de la Cámara Baja, en agosto de 2023, Armengol aseveró que «quiero manifestar mi compromiso con el castellano, el catalán, el euskera y el gallego, y la riqueza lingüística que suponen. Y quiero anunciarles que esta Presidencia permitirá la utilización de todos esos idiomas en el Congreso desde esta sesión constitutiva»; concesión que el PSOE tuvo que otorgar a sus socios 'Frankenstein' para que votaran a la socialista balear. No obstante, la antecesora de Armengol en el cargo –la también socialista Meritxell Batet– había prohibido en numerosas ocasiones que los diputados usaran las lenguas cooficiales en el Congreso.
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Por su parte, durante la Jura de la Constitución de la Princesa Leonor –en su 18 cumpleaños– la tercer máxima autoridad del Estado interrumpió la larga ovación que la Cámara estaba otorgando a la Heredera al Trono. «Alteza...», dictaminó Armengol para poner fin al acto institucional cuando la bancada socialista casi había dejado de aplaudir,
Su nepotismo en Baleares
Durante el mes de septiembre del año pasado El Debate publicó un serial –firmado por el periodista Alejandro Entrambasaguas– sobre el presunto nepotismo que había llevado a cabo Armengol en su etapa como líder del Ejecutivo de Baleares. Este periódico informó de que la actual presidenta del Congreso autorizó al llegar al poder un hotel bloqueado durante 18 años en el que su pareja tiene intereses, y que este pasó de tener 14 bienes congelados por Hacienda a facturar 4 millones tras el ascenso político de la socialista.
Sin embargo, la actual tercera máxima autoridad del Estado no ha dado ninguna explicación acerca de la irregular situación de su pareja. Tanto este asunto como que Armengol se ha convertido en un títere de Sánchez al frente de la Cámara donde reside la soberanía nacional ponen en evidencia la parcialidad y trayectoria de Francina Armengol.
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