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Juan Lobato, ex líder del PSOE de Madrid, a su llegada al Tribunal Supremo

Juan Lobato, ex líder del PSOE de Madrid, a su llegada al Tribunal SupremoEuropa Press

Filtración de datos confidenciales del novio de Ayuso

Lobato salpica al Gobierno y el juez ordena un duplicado del móvil del socialista madrileño

El ex secretario general del PSOE madrileño ha acudido a la cita del Supremo con una «copia del acta de las manifestaciones notariales que (...) realizó» y que señalan a Moncloa como el origen de la filtración del mail confidencial del novio de Ayuso que exhibió en la Asamblea

Tras más de hora y media de declaración, el ex secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, ha confirmado al juez las sospechas sobre un presunto plan del Gobierno para divulgar datos confidenciales del novio de Isabel Díaz Ayuso (inmerso en una investigación de Hacienda) con una intencionalidad política.

Según ha podido confirmar El Debate de fuentes judiciales, tras escuchar la versión del que fuera líder de los socialistas madrileños, el magistrado instructor ha decretado el volcado y duplicado de la información contenida en su teléfono móvil para determinar la existencia de responsabilidades penales que, de acuerdo con lo afirmado por Lobato, salpicarían directamente al Ejecutivo central. Por ello, el juez Ángel Hurtado quiere cotejar, de manera directa, que los pantallazos registrados ante notario se corresponden, en su totalidad, con los mensajes albergados en el terminal.

Y es que, de acuerdo con la secuencia disponible hasta la fecha, la actual jefa de Gabinete del ministro de Transformación Digital Óscar López, Pilar Sánchez Acera, entonces jefa de Gabinete de Pedro Sánchez le proporcionó el correo para que lo utilizara en una sesión de control a Ayuso. El documento le fue entregado sin marca de agua de ningún medio de comunicación, algo que, según ha detallado el socialista ante el juez, le «llamó tanto la atención» que inmediatamente preguntó «cómo había llegado» hasta ellos.

Aunque Sánchez Acera aseguró que la carta reenviada «la tienen los medios», lo cierto es que la publicación de El Plural en la que se apoyó Lobato para preguntar a Isabel Díaz Ayuso por los asuntos personales de su pareja, un ciudadano particular, es de las 09.06 horas de la mañana del 14 de marzo, fecha en la que se hizo público el pantallazo.

Esto es, en Moncloa disponían de la información sensible, al menos, media hora antes de que el citado medio de comunicación se hiciese eco de ésta. Por este motivo, las mismas fuentes consultadas por El Debate apuntan a que Sánchez Acera podría ser citada en los próximos días ya que Lobato ha desvelado que fue ella quien le remitió, de manera directa, el famoso documento con el mail de la polémica, para que lo utilizase contra la presidenta de Madrid.

El socialista acudía este viernes al Supremo, como primero de los testigos citados a declarar ante el juez que investiga al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un presunto delito de revelación de secretos.

Lobato llegaba puntual a la cita y portando una carpeta blanca con el logotipo de su partido y una copia impresa del acta notarial en la que se recoge la presunta maniobra de Moncloa para filtrar a la prensa de una serie de correos entre la defensa de Alberto González Amador, novio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y el fiscal que le investigaba por presuntos delitos tributarios.

El que hasta el miércoles fuera líder de los socialistas madrileños se sentaba frente al juez Hurtado para explicar todo lo que sabía en relación a una supuesta maniobra por la que, cada vez más, se apunta cómo desde el Gobierno de Pedro Sánchez habrían difundido «el documento secreto del novio de Ayuso», con el que él mismo se habría visto implicado.

Cuando se dio a conocer la citación, el pasado lunes, Lobato aún era líder de los socialistas madrileños. El miércoles dimitió del cargo tras la presión y el «linchamiento», como él mismo lo definió en rueda de prensa, desatada en las filas del partido por el hecho de que llevara a una notaría la conversación con un cargo de Moncloa que le reenviaba el 'email' en el que presuntamente confesaba delitos fiscales la pareja de Díaz Ayuso y que está bajo la lupa del Supremo.

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