La alcaldesa de Maracena, Berta Linares
Caso Maracena
La alcaldesa de Maracena no dimite por la investigación del secuestro porque sería «reconocer su culpabilidad»
La socialista Berta Linares pide declarar cuanto antes para «demostrar su inocencia»
La alcaldesa de Maracena (Granada), la socialista Berta Linares, ha descartado este miércoles dimitir de su cargo por la investigación del secuestro de la concejal Vanessa Romero perpetrado en febrero por la que entonces era su pareja sentimental, ya que sería «reconocer una culpabilidad» que ha garantizado no tener.
En una comparecencia ante los medios en el Ayuntamiento de Maracena, Linares ha reiterado que no está investigada en este caso, que lleva el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada, que el pasado 25 de mayo levantaba el secreto de sumario sobre las actuaciones a través de un auto en el que acordaba deducir testimonio de todo lo practicado a la Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) contra ella, el concejal de Urbanismo en funciones, Antonio García Leyva, y el hasta ayer número tres del PSOE andaluz y exalcalde maracenero, Noel López, «como presuntos inductores» de un delito de detención ilegal o, en su defecto, de conspiración.
«No voy a dimitir porque creo que dimitir sería reconocer una culpabilidad que no es tal», ha indicado la alcaldesa, que ha detallado que su defensa ha presentado ante el Juzgado de Instrucción número 5 de Granada un documento en que el acata el auto, «no por las acusaciones» que puedan derivarse del mismo, sino para posicionarse sobre el hecho de que quiera deducir testimonio al TSJA.
La idea es que el documento se derive al TSJA y que «cuanto antes» se le pueda tomar declaración, pues, ha proseguido Linares, «todo lo que se está utilizando» contra ellos es «la acusación que hace» su expareja, quien «reconoce que no está bien» psiquiátricamente.
Así las cosas, ha pedido declarar «cuanto antes» para demostrar su «inocencia», una vez que la apertura del sumario en vísperas de las elecciones municipales «ha repercutido en la ciudadanía». «No nos parece justo que así haya sido», ha afirmado Linares después de que el PSOE perdiera el domingo la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Maracena.
«Amenazas» de la secuestrada
La alcaldesa de Maracena ha aludido también a que la concejal secuestrada intentaba «amenazarnos» con unos expedientes públicos que tenía «en su coche» mientras veía «si seguía en el equipo de gobierno o no», y que la Justicia no ha requerido ningún documento al Ayuntamiento.
En la misma línea, en el escrito de súplica presentado al juez con fecha de este pasado martes, alude a «la esperpéntica versión ofrecida por el investigado —con el único fin de solicitar su libertad en un fallido intento tardío de colaborar con la administración de justicia—», que «no ha sido corroborada por la propia víctima, ni por ninguno de los testigos que han comparecido a prestar declaración en la presente causa».
Es una «versión que ha resultado igualmente desmentida tras el análisis de los terminales móviles, así como por el resto» de diligencias practicadas; de manera que, según ella, «la inexistencia absoluta de prueba debió conducir a seguir la causa tan solo frente al único y, en principio, presunto responsable de la detención ilegal» de Romero, «evitando de este modo continuar la causa frente a quien ninguna participación ha tenido en los hechos objeto de investigación».
«Nos sentimos totalmente indefensos cuando todo se está haciendo circular», ha indicado Linares a los medios, apuntando a su «cero vinculación» con el tema y pidiendo sensibilidad para con «compañeros y familias» que están «sufriendo» por estarse «falseando todo lo que está ocurriendo».
Ha aclarado también que la Guardia Civil le indicó que sobre el día de los hechos «no se podía hablar nada» y que así lo hizo, y, preguntada por la decisión de Noel López de apartarse «temporalmente» de sus funciones como secretario de Organización del PSOE de Andalucía, la alcaldesa ha señalado que es lo «correcto por su parte» para «no afectar a la próxima campaña», pero que ello no implica «reconocer ninguna culpabilidad, que no la hay».
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