El convento de los Capuchinos se construyó en 1970
Cádiz
Los Capuchinos echan el cierre a tres siglos y medio de historia en Jerez con la venta del convento
La Orden mantiene solo la iglesia para el culto, que se atenderá desde Sanlúcar de Barrameda
Un capítulo de más de tres siglos y medio de historia está a punto de cerrarse en Jerez de la Frontera. Se trata de la larga y estrecha relación de 364 años entre la Orden de los Hermanos Capuchinos y la ciudad gaditana. La Orden ha dado el paso de poner a la venta su convento de la calle Sevilla, en el centro de la localidad.
El actual convento, con la Iglesia de la Divina Pastora, se levantó en el año 1970 y allí se radicaron los hermanos de esta área. Sin embargo, la falta de vocaciones hizo que la Orden tomara la decisión de integrar a todos sus frailes en el convento de Sanlúcar de Barrameda, en un bello edificio del siglo XVII. El 'traspaso' fue adoptado en 2017 y desde entonces se viene manteniendo el culto en la iglesia jerezana desde Sanlúcar, pero sin presencia de los hermanos.
Ahora, la casa de Jerez echa el cierre con la salida a la venta este edificio de 1.600 metros cuadrados, de los cuales se enajenan cerca de mil. La Orden mantendrá la iglesia y la sacristía y seguirá celebrando misa en Jerez, pero los cultos estarán asistidos desde Sanlúcar, como viene sucediendo. Se calcula que la venta de este inmueble, en una zona demandada de Jerez, podría rondar los 1,5 millones de euros.
La Defensión, afectada
La maniobra no afectará, por tanto, a los frailes, que ya estaban transferidos en Sanlúcar, pero sí afectará a la Hermandad de la Defensión, que usa sus dependencias, y a la delegación de Manos Unidas de Jerez. Estos ya han recibido el aviso para desalojar el edificio de tres plantas de altura.
Los Capuchinos llegaron a Jerez en 1661. El convento fue fundado por el padre Francisco de Jerez y un grupo de siete frailes que se situaron en las afueras de la ciudad, en el conocido como Valle de San Benito. La exclaustración de la desamortización, en el siglo XIX, afectó a la Orden y marcó el declive del convento. En 1970 se construyó el nuevo y moderno edificio, siguiendo la estética de austeridad capuchina.
Con el cierre anunciado de Jerez, que ya carecía de actividad, solo el convento de Sanlúcar de Barrameda mantiene la presencia de los Capuchinos en Cádiz. Allí viven cinco frailes, uno más que en las instalaciones de la Orden en la capital andaluza, Sevilla. En total, los Hermanos mantienen 25 fraternidades en España, con 148 hermanos. En Jerez, por su parte, quedan ya menos de ocho conventos y monasterios con presencia de religiosos.