La antigua promesa del pilotaje de carreras Antolín González, en prisión por la muerte de su padre

La antigua promesa del pilotaje de carreras Antolín González, en prisión por la muerte de su padre

El juez envía a prisión al expiloto Antolín González por el parricidio de Aranda de Duero (Burgos)

El juzgado de guardia ha ordenado el ingreso en la cárcel del joven de 23 años de manera comunicada y sin fianza

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Aranda de Duero (Burgos), en funciones de guardia, ha acordado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del joven de 23 años Antolín González, acusado de matar a su padre en este municipio burgalés.

González, que este pasado sábado fue detenido como supuesto autor de la muerte de su padre, de 56 años, el mismo nombre y apellido y a quien agredió con un arma blanca en el cuello, había pasado a primera hora de la tarde del martes a disposición judicial.

Poco antes de las 15:00 horas de este martes un coche de la Policía Nacional trasladaba al supuesto parricida a los juzgados de Aranda de Duero, donde la jueza ha tomado declaración durante toda la mañana a ocho testigos y tras lo cual ha decretado su ingreso en prisión provisional, según han informado a Efe fuentes judiciales.

El parricidio tuvo lugar sobre las tres de la tarde del sábado pasado en una nave industrial de Aranda de Duero. A la llegada de los agentes de la Policía Nacional se encontraron al hombre con vida y una herida de arma blanca en el cuello, aunque los sanitarios que se desplazaron al lugar no pudieron salvarle.

Llegada a los juzgados de Antolín González

Llegada a los juzgados de Antolín GonzálezEFE

El agresor se dio a la fuga y fue detenido posteriormente sin ofrecer resistencia en la localidad de Sinovas, que pertenece a Aranda de Duero.

El joven detenido carecía de antecedentes policiales, según la Subdelegación del Gobierno en Burgos. El fallecido es el propietario de Aceitunas Antolín y es un empresario del negocio del encurtido muy conocido en la localidad.

Por su parte, el agresor era una promesa del mundo de la automoción desde los ocho años, cuando batió el récord de la pista de Villariezo a bordo de un kart. Posteriormente competiría en Fórmula 4 y Fórmula 3, aunque nunca llegó a la Fórmula 1 por falta de apoyo económico. Fuentes vecinales próximas a la familia indicaron a Efe que un posible desencuentro familiar pudo estar detrás de este parricidio.

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