Videojuego 'Toymaker: Threads of Joy'
Salamanca se convierte en el escenario de un videojuego ambientado a principios del siglo XX
Está inspirado en la leyenda de la Cueva de Salamanca, permitiendo a los jugadores recorrer dos caminos narrativos: el del maestro y el de la dama
La Salamanca de principios del siglo XX resucita gracias a Toymaker: Threads of Joy, un videojuego de creación artesanal desarrollado por Uprising Studios, empresa afincada en Salamanca. El proyecto sitúa al jugador en el corazón de la ciudad charra en 1911, en una recreación detallada de sus calles, plazas y leyendas populares.
La historia del videojuego se inspira en la leyenda de la Cueva de Salamanca, permitiendo a los jugadores recorrer dos caminos narrativos: el del maestro y el de la dama. Este planteamiento combina la creación artesanal con mecánicas de simulación, gestión de tienda y novela visual, en un entorno lleno de referencias históricas y culturales, según explican sus creadores.
Por ejemplo, el jugador tendrá que fabricar peluches, atender a sus clientes y desentrañar los secretos que se esconden tras la vida cotidiana de una Salamanca, que combina el encanto de sus escenarios históricos, como el Puente Romano o el Mercado de Abasto, con una atmósfera de misterio y fantasía.
El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo y David Iglesias, cofundador de Uprising Studios, en la presentación del videojuego
La banda sonora también rinde homenaje a la tradición local, incorporando canciones folclóricas y ritmos tradicionales salmantinos, como la charrada o los bailes de Peñaparda (ajechao, sorteao, corrido y brincao).
Campaña de micromecenazgo
El estudio planea lanzar el videojuego en 2026 en PC a través de la plataforma Steam, donde ya se puede reservar, pero antes deberá terminar de financiarse a través de su campaña de micromecenazgo que saldrá pronto y que también se puede seguir a través de la plataforma Kickstarter.
En el futuro, el objetio es llevar el juego a más plataformas para que «sea accesible a un público más amplio», apuntó David Iglesias, cofundador de Uprising Studios, durante la presentación del videojuego.
El proyecto, apoyado por el Plan de Sostenibilidad Turística de Salamanca, está cofinanciado por el Ayuntamiento, la Junta de Castilla y León y el Gobierno de España. Presentar un videojuego «no es lo habitual», decía el alcalde de la ciudad, Carlos García Carbayo, durante la presentación, pero «dice mucho de los cambios que se están llevando a cabo en Salamanca».