Leire Pajín acusa a la derecha de desinformar y pide «liberar» a Castilla y León de quienes «niegan la realidad»

El PSOE reúne en Salamanca desde este viernes y hasta mañana a buena parte de su núcleo ideológico para arropar al candidato socialista a la Junta de Castilla y León, Carlos Martínez, y relanzar su mensaje en la Comunidad, donde buscan blindarse frente al desgaste creciente del Gobierno central. En la primera sesión de la IV Escuela de Gobierno, partició Leire Pajín, diputada del Parlamento Europeo, quien acusó a la derecha de «desinformar», y pidió que Castilla y León se «libere» de quienes, según dijo, «niegan la realidad» de retos como la emergencia climática.

Pajín inició su intervención defendiendo que la representación pública debe funcionar como «una escuela permanente», un espacio donde los dirigentes socialistas se formen ante «los retos de hoy y de mañana». Frente a ese modelo, acusó a «la derecha y la extrema derecha» de utilizar «bulos permanentemente», y sostuvo que la única respuesta es reforzar la «conciencia crítica» y el intercambio de información entre militantes y cargos públicos del partido.

La eurodiputada reivindicó la importancia de la Unión Europea para Castilla y León, y aseguró que la Comunidad «se ha modernizado gracias a la solidaridad de otros territorios». Advirtió de que la UE afronta los «retos más importantes de los últimos 50 años» y que su espacio democrático está «amenazado» tanto por potencias exteriores como por intereses económicos que, a su juicio, pretenden debilitar la regulación europea.

«Martínez será presidente»

Pajín elogió al alcalde de Soria, Carlos Martínez, al que definió como un referente capaz de conectar lo local con lo internacional. Llegó a presentarle como «la persona que aspira y será el presidente de esta tierra», argumentando que su visión encaja con la necesidad de que Castilla y León tenga presencia en Bruselas y en los debates globales.

Durante su intervención en la IV Escuela de Gobierno, celebrada en el emblemático Colegio Arzobispo Fonseca, también hizo alusión a los incendios ocurridos el pasado verano en territorios como Zamora, León y Valencia para subrayar la importancia de la cooperación europea y la gravedad de los fenómenos climáticos.

Recordó que, durante aquellos incendios, Castilla y León recibió ayuda de profesionales de otros países y criticó la «negligencia» de algunos dirigentes mientras, según dijo, los equipos internacionales trabajaban «al pie del cañón».

La exministra enlazó ese episodio con su denuncia política, acusando al Partido Popular de votar en contra de compromisos climáticos europeos, y calificó esa postura como un riesgo directo para los ciudadanos. «Negar la realidad implica no saber prever incendios, inundaciones o fenómenos extremos», dijo, y situó ese debate como clave para el futuro de Castilla y León. «Debemos liberar a esta tierra de quienes niegan la realidad», aseguró.

En el tramo final, vinculó esa idea con los derechos de las mujeres y sostuvo que, allí donde gobiernan «la derecha y la extrema derecha», el retroceso «empieza por nosotras». Llamó a una «gran movilización» social y política ante lo que considera amenazas reales y concluyó defendiendo que Castilla y León tiene «un enorme futuro por delante» si lo encabeza un liderazgo socialista capaz de anticipar retos globales.