Este jueves, día D para que buena parte de Cataluña entre en fase de emergencia por sequía
Cataluña
Este jueves, día D para que buena parte de Cataluña entre en fase de emergencia por sequía
Los embalses de las cuencas internas ya se encuentran por debajo del 16% de su capacidad
Esta fase no comporta restricciones en el consumo de agua de boca
Este jueves se reúne la comisión Interdepartamental de la Generalitat para declarar la emergencia por sequía en el sistema Ter-Llobregat. Los embalses de las cuencas internas de Cataluña se encuentran ya por debajo del límite del 16 % que había fijado el Govern para entrar precisamente en esta fase. En concreto, ahora están al 15,80 % de su capacidad. El ejecutivo catalán se ha estado resistiendo y alargando lo máximo posible esta situación, pero lo cierto es que las altas temperaturas de los últimos días no han hecho más que complicar el panorama. Unos 200 municipios se verán afectados, entre ellos Barcelona y Gerona, o lo que es lo mismo, unos seis millones de personas.
La emergencia consta, a su vez, de tres fases diferenciadas que implicarán restricciones que van de menos a más. En esta primera fase, no habrá afectaciones en el consumo de agua de boca. Se podrá consumir un máximo de 200 litros por persona y día, aunque la mayoría de pueblos y ciudades del área metropolitana de Barcelona se encuentran por debajo de esa cantidad.
También en esta fase las instalaciones deportivas deberán reducir el consumo de agua. En un primer momento, el Govern había asegurado que no se podrían utilizar las duchas, pero finalmente dio marcha atrás. Sí, se podrán usar. Y con relación a otras instalaciones deportivas, las que cuenten con piscinas, podrán seguir llenándolas y regando los campos, pero eso sí, deberán ahorrar agua en otros ámbitos para compensar. Lo que sí queda totalmente prohibido es llenar piscinas privadas, como es el caso de las de comunidades de vecinos, hoteles o campings.
Por lo demás, se podrán regar los árboles con agua freática, de depuradora o regenerada. Esto es precisamente lo que había pedido el Ayuntamiento de Barcelona, que ha preparado un plan de contingencia, que consta de un equipo de 250 operarios, que se encargarán de regar a mano los árboles de la ciudad cuando se entre en esa fase de emergencia, que será cuando se publique en el DOGC.
Y, en cualquier caso, recordemos las importantes restricciones que ya sufren algunos sectores económicos, como el agrícola, que con la emergencia ya se podría alcanzar hasta un 80 % de recorte en el consumo de agua. La ganadería sufrirá una reducción del 50 % y los usuarios industriales un 25 %.
Como decíamos, la emergencia consta de tres fases claramente diferenciadas, en las que cada vez se podrá consumir menos agua. No hay una gran diferencia, eso sí, entre la 1 y la 2. En la última de ellas, en la fase 3, además de reducir el consumo de agua hasta los 160 litros por persona y día, estarán cerradas todas las duchas de las instalaciones deportivas, incluidas la de los gimnasios; estará prohibido llenar piscinas deportivas y el riego en los deportes federados; y también se prohibirá el riego de supervivencia de los árboles de las zonas verdes excepto en el caso de los que tengan carácter singular o monumental.
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