Fundado en 1910

03 de mayo de 2024

El exvicepresidente Jordi Puigneró en la presentación del Catvers

El exvicepresidente catalán Jordi Puigneró en la presentación del Catvers

Cataluña

Adiós al Catvers, el «metaverso catalán» que prometía ser un paso hacia «la identidad digital catalana»

  • El Centro de Blockchain de Cataluña, que impulsó el proyecto, ha «parado temporalmente su actividad»

  • La Generalitat destinó 400.000 euros y otras instituciones, como el Ayuntamiento y la Diputación de Gerona, casi 300.000

Hace un par de años, el entonces vicepresidente de la Generalitat y consejero de Políticas digitales, Jordi Puigneró, no paraba de hacerse fotos y de sacar pecho por los avances tecnológicos catalanes, y, en especial, los participados por la Generalitat. Se lanzó el primer nanosatélite, el «Enxaneta», se impulsó el proyecto AINA, para que las máquinas pudieran «hablar en catalán», y también se lanzó el Catvers, el metaverso catalán, que prometía ser un paso hacia la «identidad digital catalana». Pero dos años después, esta última iniciativa se ha ido al traste.
El exvicepresidente de la Generalitat, Jordi Puignerò (i) y el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès

El exvicepresidente de la Generalitat, Jordi Puignerò (i) y el presidente de la Generalitat, Pere AragonèsEuropa Press

Y es que ha tenido que «parar temporalmente su actividad» el Centro de Blockchain de Cataluña (CBCat), que nacía en 2020 de la mano de la Cámara de Comercio de Barcelona, gobernada entonces por los independentistas. Este centro tuvo precisamente como propuesta estrella el Catvers. Pues bien, ahora dicen que es necesario una «redefinición del proyecto» y de sus infraestructuras para «ajustarlo a las necesidades empresariales con una visión a medio y largo plazo».
Cuando se inauguró el CBCat, el exvicepresidente Puigneró aseguraba que «el Blockchain es una tecnología que se basa en el empoderamiento de la gente, y cuando este país empodera a la ciudadanía es imparable; y esto da miedo al Estado Español».
Dos años más tarde, en enero de 2022, se presentó el Catvers, un espacio digital inmersivo, una especie de realidad paralela en la que se podrán llevar a cabo diferentes actividades. Por ejemplo, se podrían hacer reuniones, convertirse en una especie de sala de exposiciones o incluso llevar a cabo acontecimientos más grandes, como una especie de «minifestivales». Es más, se llegó a asegurar que podría tener una moneda propia.
La inversión del Ejecutivo catalán fue de 400.000 euros para la puesta en marcha del proyecto, teniendo en cuenta que se esperaba que esta cifra se tradujera en «empleos y progreso» y porque se trataba de una apuesta por la «economía catalana». Y sobre todo, porque Cataluña no quería vivir de las subvenciones, sino del talento, en palabras de Jordi Puigneró.

Sin usuarios

Durante los dos primeros meses, el servicio fue gratis, para que los usuarios pudieran probar la iniciativa. Y de esa prueba surgieron también las primeras críticas. Y es que no ofrecía «valor añadido», según dijeron los usuarios, porque no se podía ir más allá de pasear por la pantalla inicial. Se supone que se pretendía potenciar el catalán, pero las explicaciones estaban en inglés y para poder trabajar en este Catvers se pedían 20 euros al mes. Fueron pasando los meses, y ese metaverso catalán no tenía usuarios. Y nunca los ha tenido.
Pantalla inicial del Catvers el día de su presentación

Pantalla inicial del Catvers el día de su presentación

Pero no solo la Generalitat ha puesto dinero en el proyecto. También lo ha hecho la Diputación y el Ayuntamiento de Gerona, ambas instituciones gobernadas por los independentistas. Concretamente, destinaron casi 300.000 euros, que iban a parar a gastos ordinarios, organización y también el funcionamiento del programa de actividades.
Lo que, para el entonces vicepresidente Jordi Puigneró, era la única manera de «proteger la nación, qué ha significado el pal de paller (la piedra angular) de nuestra identidad, que ha sido todo su entorno, su cultura, e identidad lingüística» se ha ido al traste. Y ahora, carga las tintas contra el Govern. No hay que perder de vista que Puigneró es de Junts: “Hace 3 años impulsamos en Cataluña la creación de un Centro de Blockchain que ahora se cierra porque el Govern no cree. Es inaudito no apostar por una tecnología, que junto con la IA y la cuántica, tendrá un gran impacto en los actuales modelos productivos y de servicios. Inaudito".

Otras iniciativas

Era esa época en la que también se impulsó el proyecto ‘AINA’ para «que las máquinas puedan hablar en catalán y que la relación hombre- persona-máquina también se pueda hacer en este idioma». Es más, en abril de 2022 el exvicepresidente posaba orgulloso desde la plaza Times Square de Nueva York justo en el momento en que se proyectaba un anuncio que reivindicaba el catalán como lengua de futuro en el mundo digital. El anuncio en cuestión, que se proyectó durante 24 horas, costó 3.250 euros, por cierto.
Y tampoco se puede olviar la llamada Estrategia NewSpace de Cataluña, que según dice la propia Generalitat, «desplegará un programa de actuaciones específicas para fortalecer el ecosistema del NewSpace catalán y liderar la generación de conocimiento, su aplicación social y empresarial, y la creación de nuevas soluciones basadas en datos facilitados por el uso de nuevas tecnologías en este ámbito, con el objetivo de fomentar el crecimiento económico y mejorar la vida de las personas».
De momento, se han lanzado tres nanosatélites. El primero fue el «Enxaneta», en febrero de 2021, que tuvo un coste de casi 575.000 euros. El segundo contrato de nanosatélite, el de «Menut», se lo adjudicó Open Cosmos por 1,72 millones. Y el tercero, «Minairó», se lanzó en abril del año pasado. Sateliot, participada por Cellnex e Indra, se adjudicó este servicio por 650.000 euros.
Comentarios
tracking