Illa asume otra reivindicación nacionalista: luchará para que Cataluña tenga un banco público propio

La consellera de Economía y Finanzas de la Generalitat, Alícia Romero, ha anunciado este martes en el pleno del Parlament que la semana que viene se reunirá con el Banco de España para conseguir su visto bueno a convertir el Instituto Catalán de Finanzas (ICF) en una «banca pública de inversión real».

Se trata de una vieja reivindicación nacionalista, pero ninguno de los gobiernos de CiU, Junts o ERC lo ha conseguido hasta ahora, ya que siempre que lo han intentado –la última vez en 2021, gobernando Pere Aragonès– se han encontrado con el «no» del Banco de España, el primer obstáculo para el camino.

Esto es así porque el primer paso para que el ICF pase a ser un banco público es tener un informe preceptivo favorable del Banco de España, con el que luego se podrá realizar la petición formal al Banco Central Europeo (BCE), que decidirá si expide o no la ficha bancaria correspondiente.

De conseguir el ejecutivo de Salvador Illa su objetivo, según recoge El Periódico, el nuevo banco público catalán tendría acceso directo a la financiación del BCE, así como acceso a crédito más barato, participar en subastas de liquidez y aceptar depósitos de empresas e instituciones. Según Romero, podría funcionar como «palanca de transformación» de la economía catalana.

Propuesta de ERC

Ha sido ERC, socios de investidura de Illa, quien ha traído a colación el debate al Parlament. El diputado republicano Albert Salvadó ha recordado los intentos de su partido para lograrlo, lamentando que “si no ha pasado hasta ahora es porque el Estado no ha querido".

Precisamente este escollo es el que hace distinto el intento de Illa, ya que en esta ocasión el Banco de España está gobernado por el exministro socialista José Luis Escrivà. A nadie se le escapa la dependencia del Gobierno de Pedro Sánchez de los votos de los partidos nacionalistas, así como de que Cataluña se mantenga como caladero de votos socialistas.

Desde ERC apuntan también a la posibilidad de que la opa del BBVA al Sabadell salga adelante como un factor que podría acelerar la decisión, ya que en este escenario ven necesario «tener una banca pública que compita de tú a tú con los bancos y que llene los vacíos que estos dejan». Todo ello llena de optimismo a Romero, que ha augurado en el pleno que el proceso podría ser cuestión de «meses» y no de «años».