Los médicos catalanes advierten a la Generalitat que la huelga de este viernes puede ser el inicio de un ciclo de protestas

El Sindicato Médicos de Cataluña (MC), mayoritario entre los facultativos de la sanidad pública y concertada, advertirte que la huelga convocada este viernes puede ser el inicio de un ciclo de protestas para reclamar mejoras en diferentes ámbitos, no solo en lo que respecta al Estatuto Marco, sino también en otras cuestiones en que la consejería de Salud de la Generalitat tiene competencias, como la jornada laboral y la sobrecarga en la atención primaria.

La huelga afectará a médicos adjuntos y residentes, así como a otros profesionales como farmacéuticos, psicólogos, biólogos, odontólogos, radiofísicos, químicos y bioquímicos, en centros de atención primaria (CAP), hospitales, urgencias y centros sociosanitarios del Instituto Catalán de la Salud (ICS) y la sanidad concertada con el CatSalut.

Esta movilización, la primera en la que los médicos de Cataluña se suman a las protestas estatales contra la reforma del Estatuto Marco impulsada por el Ministerio de Sanidad, busca «recuperar la dignidad» en el ejercicio profesional médico y exigir mejoras laborales específicas, según ha explicado el secretario general del sindicato, Xavier Lleonart, en declaraciones a la ACN.

Los médicos exigen un convenio propio que mantenga una clasificación profesional y retributiva diferenciada para los facultativos de acuerdo con la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS). Esta distinción se justifica por la formación requerida —seis años de estudios universitarios más entre cuatro y cinco de especialización— y por la responsabilidad inherente en el sistema sanitario, lo que les otorgaría una categoría A1+ en el Estatuto Básico del Empleado Público, con un ámbito de negociación exclusivo a nivel estatal y autonómico, evitando ser diluidos en un estatuto común con otros colectivos sanitarios.

Peticiones de los médicos de Cataluña

Respecto a las guardias, una de las demandas centrales es su reducción progresiva hasta un máximo de 12 horas consecutivas, en lugar de las actuales de 24 horas, que se computen como horas extraordinarias con una retribución equivalente a la hora ordinaria y no afecten al cómputo para la jubilación. Según Médicos de Cataluña, los facultativos tienen que trabajar más de 2.200 horas al año.

Además, se reclama un descanso semanal ininterrumpido de 36 horas. Lleonart critica que este modelo «sobreexplota» al personal y ha sido «extinguido» en Europa, y enfatiza que la solución radica en contratar más médicos, por lo que, según él, se desmonta el argumento de la escasez de personal: «En los hospitales privados no les cuesta tanto encontrarlos».

En cuanto a la jornada laboral y la sobrecarga, los facultativos proponen una jornada máxima de 35 horas semanales en horario de mañana, considerando el exceso como voluntario y debidamente compensado. Específicamente en atención primaria, demandan limitar las agendas de los médicos de familia a un máximo de 25 actos asistenciales diarios, ya sean presenciales o no presenciales, y mantener el tercio de jornada no asistencial en el ICS, extendiéndolo a todos los facultativos.

Esta petición hace referencia a los acuerdos de la huelga de 2018, que redujeron la sobrecarga asistencial, pero que han sido desvirtuados por el aumento de visitas telefónicas y virtuales, según el sindicato. Para abordar la fatiga acumulada, MC urge iniciar los procedimientos para aplicar coeficientes reductores que permitan la jubilación anticipada de los médicos, de modo que las horas de guardias computen plenamente a este fin, reconociendo la intensidad del trabajo realizado a lo largo de la carrera profesional.

Asimismo, se reclama la financiación íntegra de las actividades de formación, docencia e investigación por parte del sistema, independientemente del nivel de complejidad organizativa. De este modo, quieren que se garantice el tiempo dedicado en exclusiva para estas actividades, sin que la sobrecarga asistencial suponga un recorte en las horas de formación.

En materia de gestión de la demanda y conciliación, los médicos piden regular el exceso de pacientes en primaria y hospitales mediante programas voluntarios de absorción con compensación adecuada, rechazando la eliminación de referencias a ratios adecuados de personal, planes de conciliación familiar y restricciones en la movilidad profesional en el nuevo Estatuto Marco.

Estas medidas buscan no solo aliviar la presión diaria, sino también canalizar la «indignación» del colectivo hacia soluciones estructurales, como advierte Lleonart: «Los gestores y políticos tienen un problema y deben ponerle solución». La concentración ante el Departamento de Salud este viernes servirá para visibilizar estas demandas de forma directa.

Funcionamiento de los CAP y hospitales

El Departamento de Salud ha decretado servicios mínimos para garantizar la atención esencial durante el paro. En los centros de atención primaria (CAP), se mantendrá el 25 % de la plantilla, lo que asegurará la apertura para casos urgentes y la asistencia domiciliaria. No habrá visitas programadas.

En los hospitales, se preservará el pleno funcionamiento de las urgencias, unidades de cuidados intensivos (UCI), partos, hemodiálisis, radioterapia y quimioterapia, y se priorizará la atención a pacientes críticos. También se deberá atender la cirugía urgente.

En el transporte sanitario, se garantizará el servicio para atender todas las urgencias sanitarias de cualquier tipo, para tratamientos oncológicos, o de diálisis, o para aquellas pruebas que sean urgentes, a criterio del médico.