El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, con la concejala Gloria Tello.
Comunidad Valenciana Ribó cede a la ola de críticas: la Virgen de los Desamparados se queda en el Ayuntamiento
El portavoz 'naranja', Fernando Giner, se felicita por el acuerdo y destaca que la estatua simboliza un ejemplo «de concordia y unidad»
El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, ha logrado un acuerdo con el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Valencia para que, finalmente, la talla de la Virgen de los Desamparados se quede en el edificio del Consistorio.
Así lo ha anunciado el propio concejal 'naranja', que ha señalado que en su formación están «muy satisfechos» porque la Madre de Dios representa «la cultura, identidad e historia» de Valencia «como ciudad y Región». Por ello, considera que merece estar «en la casa de todos».
Ante la decisión que había tomado el alcalde, Joan Ribó, de sacar la estatua del Ayuntamiento y llevarla a otra ubicación cerca del Palacio Arzobispal, Giner celebra que se «haya impuesto el diálogo y el consenso» al respecto porque el de la Virgen es un ejemplo de «concordia y unidad».
En un primer momento, Ribó se había escudado en unas obras que se están realizando en el edificio para sacar la talla de su ubicación. Sin embargo, el Partido Popular denunció que en el proyecto inicial de dicha reforma, lejos de recomendar que se sacara del Ayuntamiento, se indicaba que se recolocara en una sala cercana.
«Decisión correcta»
Desde ese momento, tanto PP como Ciudadanos y Vox criticaron la decisión del regidor y le reprocharon que, más que una obligación por motivos de la obra, se debía a su «sectarismo».
Así, la portavoz del PP y candidata a la alcaldía, María José Catalá, achacó la postura de Ribó a «una cuestión ideológica», en base a la cual se demostró «poco respeto» al significado que la Virgen tiene para los valencianos.
A su vez, y a tenor de los hechos, la petición que desde las filas populares le hicieron al alcalde pidiéndole «recapacitar», ha dado sus frutos.
Por su parte, el portavoz municipal de Vox, Pepe Gosálbez, calificó al alcalde de «destructor», no solo por el asunto de la Virgen de los Desamparados, sino también por otras actitudes que el dirigente de Compromís ha tenido hacia celebraciones y simbologías católicas
«Acto heroico»
Aun así, Giner reconoce que es «una buena noticia» que el primer edil «haya reflexionado» y haya tomado «la decisión correcta» porque, a su juicio, la presencia de la Virgen en el Consistorio no responde a «una cuestión religiosa, sino puramente cultural e histórica».
De hecho, la ubicación que tenía hasta el momento ha venido siendo la suya desde el año 1954. Instalarla ahí fue un símbolo en homenaje al que fuera alcalde de Valencia durante la Guerra Civil, el republicano José Cano. Este mandó proteger la estatua de las atrocidades que se estaban cometiendo por parte del bando comunista y ordenó que se resguardase en el Ayuntamiento, junto a un busto del Rey Jaime I El Conquistador y la Real Señera.
Por tanto, el portavoz de Ciudadanos ha apelado a ese «acto heroico de protección del patrimonio que no entendió de derechas, izquierdas ni de ideas», sino únicamente de «identidad valenciana».
Por todo, Giner se ha vuelto a felicitar de que, a pesar de la polémica surgida hace unas semanas por el alcalde levantino, la denominada Virgen de los funcionarios –ya que ellos pagaron la réplica- «sea expuesta en un lugar visible y visitable para todos los valencianos». En su opinión, es «un recuerdo del pasado que merece la pena potenciar, enseñar y proteger».
Asimismo, cabe recordar que la Virgen de los Desamparados es la patrona de la ciudad y su Alcaldesa Honoraria Perpetua.
Además, este 2022 había sido declarado Año Jubilar Mariano con motivo del centenario de la Coronación de la Virgen.
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