Foto de archivo de la consejera de Hacienda y Economía valenciana, Ruth Merino

Foto de archivo de la exconsejera de Hacienda y Economía valenciana, Ruth MerinoGVA

La Generalitat Valenciana anuncia la prórroga automática de los presupuestos de 2025 ante la imposibilidad de aprobar las cuentas de 2026

La Administración autonómica activa la prórroga del actual marco económico mientras revisa partidas sensibles y mantiene abiertas las conversaciones políticas de cara al próximo ejercicio

El Gobierno valenciano ha trasladado oficialmente a las Cortes que será necesario prorrogar los presupuestos de 2025 porque las de 2026 no podrán entrar en vigor el próximo 1 de enero. La advertencia figura en una carta firmada por el secretario autonómico de Hacienda y Financiación, Eusebio Monzó, y remitida por el secretario autonómico de Relaciones Institucionales y Transparencia, Santiago Lumbreras, en la que se informa de que la Dirección General de Presupuestos está ya ocupada en «la preparación de dicha prórroga, así como de la normativa que la regula».

El documento, fechado por Monzó el 13 de noviembre y registrado en las Cortes Valencianas el martes 2 de diciembre, coincide en el tiempo con la toma de posesión de Juanfran Pérez Llorca como presidente de la Generalitat. Desde la Conselleria de Hacienda y Economía subrayan que el procedimiento es un «trámite automático», la misma fórmula que se empleó en 2024, y justifican la prórroga por la falta de margen para culminar la tramitación parlamentaria antes del cambio de año.

Sin renuncia a negociar las cuentas

Desde la Conselleria que hasta ahora dirigía la 'popular' Ruth Merino han insistido en que la notificación no supone una renuncia definitiva a tramitar los presupuestos de 2026. Desde el departamento han insistido en que la prórroga es un mecanismo formal: si el 1 de enero no hay unas nuevas cuentas aprobadas, «automáticamente» se mantienen las vigentes y hay que activar los trámites administrativos correspondientes. La propia consellera, tras la investidura del nuevo presidente, aseguró que el Gobierno valenciano seguirá trabajando «en todos los escenarios» y defendió un ritmo paulatino: «Vamos paso a paso».

A nivel político, la negociación de las cuentas de 2026 depende, en la práctica, del apoyo de Vox. El partido liderado por Santiago Abascal confirmó hace unos días la existencia de «conversaciones» con el PP para abordar el contenido de las próximas cuentas. Sin embargo, Vox ha manifestado sus reservas y ha defendido que las partidas aprobadas para 2025 -ratificadas el pasado 31 de mayo- deberían ejecutarse «al 100 %» antes de avalar unas nuevas.

Balance y próximas fechas

El Consell ha activado los mecanismos para prolongar la vigencia de las cuentas de 2025 y ha puesto en manos de la cámara la identificación de partidas no prorrogables. Al mismo tiempo, mantiene abierta la posibilidad de aprobar unos nuevos presupuestos cuando se materialicen las negociaciones políticas necesarias. La situación deja la Generalitat en una senda administrativa conocida -la prórroga- pero con la política presupuestaria dependiente de negociaciones aún en curso entre los grupos, en especial entre PP y Vox.

La prórroga entrará en vigor de forma automática si el 1 de enero no hay nuevas cuentas, y hasta entonces la maquinaria técnica y política continuará trabajando para definir tanto la extensión de las partidas como la viabilidad de las cuentas de 2026.

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